Javier Quintana
El pasado martes el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, presenció cómo el equipo de Isabel Díaz Ayuso le impedía el paso a la tribuna principal del desfile cívico-militar que se celebró en conmemoración del Dos de Mayo, día de fiesta regional en la Comunidad de Madrid. La jornada se preveía movida después de que los populares insistieran en reiteradas ocasiones durante los días previos al desfile en que el ministro no tenía invitación para asistir al mismo. El Gobierno autonómico consideraba una “provocación” esta “autoinvitación” del ministro. Así pues, pese a asumir finalmente su presencia, dos empleadas de la Administración cortaron el paso a Bolaños cuando éste trataba de acceder al palco de honor. En él sí se encontraba el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. Según el Real Decreto 2099/1983 los ministros tienen preferencia sobre el propio Feijóo o sobre, incluso, el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, que también se encontraba allí.
“Lamento decepcionar a los crispadores, a los odiadores, a los que generan odio, a los que se inventan mentiras para generar lío, a los que viven cómodos en el enfrentamiento, porque no voy a dedicar ni un segundo al tema que se ha puesto de manera artificial encima de la mesa”, indicó Bolaños nada más terminar el acto. Por su parte el líder popular indicó en relación al suceso que “es evidente que llevamos un par de años con una falta de institucionalidad por parte del Gobierno central con relación a las comunidades”.
