J.Q.
Bruselas solicitó esta semana a España reducir su gasto público el próximo año un 2,6% como medida fundamental para lograr esa reducción de déficit que se antoja, de momento, tan complicada. La petición ha tenido lugar en la presentación del Semestre Europeo. «Suponiendo que las políticas no cambien, las previsiones de la primavera de 2023 de la Comisión proyectan que el gasto primario neto financiado a nivel nacional crecerá un 1,4% en 2024, que es inferior a la tasa de crecimiento recomendada», indica el documento respecto al estado español.
Hasta ahora, la CE utilizaba el ajuste estructural necesario, que en España es del 0,7% del PIB, para hacer estas recomendaciones. No obstante, la institución está cambiando sus reglas fiscales. En este nuevo marco será el gasto neto primario el que se use como dato de referencia. «Nuestras recomendaciones están, por supuesto, en línea con la legislación vigente de la UE, pero también tienen en cuenta los elementos de nuestras propuestas de reforma que son coherentes con las normas actuales», ha explicado el comisario de Economía, Paolo Gentiloni, durante su intervención.
Asimismo, la CE solicita a España “preservar la inversión pública y garantizar la absorción efectiva de las subvenciones del Fondo de Recuperación y otros fondos de la Unión Europea”. Bruselas estima también que España dejará de estar sometida a los desequilibrios macroeconómicos el próximo año.