
Mari Carmen Martínez
Ya está aquí 2023. Un año en el que, a pesar de las preocupantes noticias que llegan desde China, debe ser el que marque el fin definitivo de la pandemia de Covid; también en el que seguiremos sufriendo las consecuencias económicas y energéticas de una guerra en Ucrania que debería concluir con un periodo de paz antes de que acabe el año.
Además, ya en el terreno nacional, 2023 es un año electoral. En el mes de mayo los españoles están citados en las urnas para elegir representantes municipales y renovar algunos parlamentos autonómicos. Y a finales de año tendrán lugar las decisivas elecciones generales para otorgar nuevas mayorías en Congreso y Senado.

Las medidas impulsadas por el Gobierno de Sánchez durante el ultimo año se han mostrado completamente ineficaces: la cesta de la compra sigue cada vez mas cara y el nivel de vida se dispara frente a unos sueldos congelados
Pero entre todo eso, hay una serie de retos que España deberá afrontar a lo largo de este año. Unos, heredados e inconclusos desde el año anterior (a veces décadas) y otros nuevos que marcarán la agenda política y cuya resolución dependerá del buen acierto de nuestros dirigentes.
Economía: contener la inflación
La cuesta de enero será este año todavía más difícil para las familias españolas. Los precios siguen a niveles insostenibles y las previsiones apuntan a que seguirán esa misma tendencia en los meses siguientes. Moderar la inflación deberá ser el principal asunto económico a resolver en este 2023. Las medidas impulsadas por el Gobierno de Sánchez durante el ultimo año se han mostrado completamente ineficaces: la cesta de la compra sigue cada vez mas cara y el nivel de vida se dispara frente a unos sueldos congelados. Y las incorporadas en este 2023 parecen seguir por el mismo camino, a la vista de que la rebaja del IVA no llega a traducirse en una rebaja real para las familias.
A la ineficacia de las medidas debemos sumar el posible efecto rebote que tenga para nuestra economía cuando éstas toquen a su fin, algo que ya ha advertido el propio Banco de España; así como el riesgo de que, como en otros países de Europa, sea el año en el que entremos en recesión. Las cuentas aprobadas por el Gobierno para 2023, con el apoyo de sus socios nacionalistas, ya pecaban de un irreal optimismo en sus previsiones, que fue corregido por la mayoría de los organismos económicos nacionales e internacionales, y ante el que más valdría sustituir por altas dosis de realismo, trabajo y responsabilidad para lograr minimizar el impacto de la crisis en los bolsillos de los españoles de una vez.
Energía: el año de apostar por la nuclear
Decíamos antes que la invasión de Ucrania a manos de Putin frenó en seco la recuperación económica que debía seguir al fin de las restricciones derivadas de la pandemia, pero si ha habido un sector que ha sufrido las consecuencias de la guerra es el energético. La crisis de suministro a raíz del control de Putin del mercado de gas y petróleo ha sido uno de los grandes problemas a nivel mundial al que nos hemos tenido que enfrentar en 2022 y todo apunta que así seguirá siendo durante este año.
Como esto de las listas cada vez que empieza un nuevo año no es algo original, el propio Bill Gates ha publicado recientemente la suya en la que hace sus pronósticos para 2023. Uno de ellos es la apuesta por la energía nuclear en el camino hacia la descarbonización y para superar la dependencia del gas. Estados Unidos es uno de los países que han apostado por la energía nuclear como tecnología de respaldo a las renovables por su seguridad y, sobre todo, por sus bajas emisiones. De hecho, produce hasta el 19% de la energía que se consume a nivel estatal, un nivel similar al que sucede en nuestro país.
Pero mientras el gobierno federal estadounidense ha anunciado que va a destinar hasta 6.000 millones de dólares para alargar la vida útil de las centrales nucleares como apoyo a la transición energética, en España el Gobierno de Sánchez sigue negando una y otra vez esta posibilidad, condenando a nuestro país a seguir dependiendo de Rusia y Argelia.
Jóvenes: natalidad y sistema de pensiones
Con el inicio de año se ha hecho efectiva la subida de las pensiones al 8,5%. Esto supone que la pensión media se sitúa en torno a los 19.000 euros anuales, unos 1.367€ al mes. Desde Cs ya advertimos desde hace tiempo que vincular la revalorización a la inflación era profundamente irresponsable para asegurar la viabilidad de nuestro sistema público de pensiones y, sobre todo, injusto con los jóvenes. De hecho, presentamos una enmienda a las cuentas del Gobierno para denunciar el obús al sistema que suponía destinar casi la mitad del presupuesto se dedicase a pagar las pensiones por puro cálculo electoral. Nuestra propuesta siempre ha sido vincularlas al incremento de los salarios de aquellos trabajadores que, precisamente, van a mantener con su sueldo el sistema de pensiones. Por responsabilidad y, sobre todo, pensando en los jóvenes.
Uno de los principales retos que debemos abordar este 2023 es mejorar la situación de esta parte de la población tradicionalmente olvidada. Tanto PP como PSOE han obviado durante décadas condenando a los menores de 25 años a vivir un país que es líder europeo en desempleo juvenil o en el que es más difícil independizarse y desarrollar un proyecto de vida. Esos 19.000 euros anuales, lamentablemente, son una aspiración para muchos jóvenes que se incorporan al mercado laboral y que les permitiría cumplir sus objetivos de independizarse, adquirir una vivienda o formar una familia. Unos planes que, a la vista de los datos de natalidad en nuestro país, deberían ser una prioridad y que sólo los liberales ponemos encima de la mesa.
Europa: un año para recuperar liderazgo internacional
España asumirá la presidencia del Consejo Europeo durante la segunda mitad de este año 2023. Una posición de enorme responsabilidad internacional que deberemos aprovechar para reforzar una imagen exterior debilitada por decisiones cuestionables tomadas durante gran parte del año anterior.
El problema es que, conociendo el historial del Gobierno de Sánchez, lo que debería ser una oportunidad para hacer crecer nuestro país, será utilizado dentro de la eterna campaña electoral en la que llevan inmersos desde hace meses. El reto, en este caso, es evitar que la presidencia europea se convierta en un escaparate para Sánchez y sea, efectivamente, una oportunidad para abordar grandes temas como el fin de la guerra en Ucrania, la cuestión migratoria, la crisis energética o, en definitiva, el estado del proyecto común europeo.
Estado de Derecho: más protección a las instituciones
Despedimos 2022 con la certeza de que el Gobierno de Sánchez había traspasado todos los límites democráticos posibles para lograr su único objetivo: mantenerse en Moncloa a toda costa. A los intentos por controlar como sea el Tribunal Constitucional, a costa de eliminar derechos a los grupos parlamentarios y desacreditar a los tribunales, hay que sumar las cesiones a los nacionalistas en el Código Penal con los delitos de sedición y malversación. Todo ello, poniendo en riesgo el estado de nuestro sistema constitucional a costa de favorecer a quienes quieren romperlo.
El propio Consejo de Estado, en un reciente informe, ha alertado de las peligrosas consecuencias derivadas de esta forma de actuar del Gobierno y de su impacto en el control de legalidad constitucional. El problema es que los planes de Sánchez no sucumben ante nada ni ante nadie, y el siguiente escenario será poner la alfombra roja al deseo de los separatistas de celebrar un referéndum en Cataluña. Porque Sánchez ha asumido el procés como ideología propia y, si no lo remediamos, en 2023 veremos un nuevo proceso más rápido y más dañino, porque vendrá del propio Gobierno de España.
María del Carmen Martínez Granados (Jerez de la Frontera, 1979). Diplomada en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Huelva. Diputada en el Congreso de los Diputados por Cádiz desde 2019. Previamente ocupó un escaño en el Grupo Parlamentario de Ciudadanos en el Parlamento de Andalucía. Actualmente es portavoz del GPCs en las Comisiones de Hacienda; Industria, Comercio y Turismo; Agricultura, Pesca y Alimentación; y Transición Ecológica.
Creadora de la marca Miss Catas, proyecto empresarial para acercar el mundo del vino a todos los públicos con catas exclusivas para particulares y empresas. Fundadora y presidenta de la Asociación de Sumilleres de Cádiz. Es también miembro de la Asamblea de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa).