J.Q.
El Consejo de Ministros aprobó este martes el anteproyecto de ley de condiciones básicas para la igualdad en el acceso y disfrute de los servicios sociales. Se trata de una serie de servicios y prestaciones básicas que serán comunes para todo el territorio. Tal y como indica la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, será “la primera ley de servicios sociales de la historia de nuestro país”. En la actualidad, cada comunidad autónoma legisla sobre sus servicios sociales, lo que según la ministra genera “una importante desigualdad”. La norma pretende dictaminar un “catálogo común de prestaciones y servicios para los próximos meses”.
La nueva ley facilita recibir prestaciones sociales al cambiar de comunidad autónoma creando “la historia social única”, similar al historial sanitario de los pacientes. Esta medida está destinada a dar fin a los “laberintos burocráticos”.
También se elimina el requisito de empadronamiento para solicitar las prestaciones mínimas y los servicios sociales vuelven a estar reconocidos como esenciales (tal y como ocurrió durante la pandemia).
Otro de los objetivos ambiciosos de la norma es dotar a cada usuario de un profesional de referencia. Belarra hizo alusión a los durísimos recortes que este área sufrió en 2012 y 2013, así como a las privatizaciones que se han llevado a cabo en diversas comunidades autónomas, dejando a los servicios sociales “completamente asfixiados”. La ley, según la ministra, pretende ser “un balón de oxígeno” para los profesionales.