María Carrasco.
La política española empieza nuevo curso con un reto sanitario, político, económico, social y educativo por delante. La necesidad de frenar la pandemia, aprobar los Presupuestos Generales y renovar los cargos institucionales, son algunos de los flecos pendientes de este país y, sin embargo, la conciliación entre los dos grandes partidos para frenar los bloqueos cada vez parece más alejada.
El lunes Pedro Sánchez desveló en una entrevista en La hora de la 1 de TVE que había un acuerdo al 99% con Casado para la renovación de las instituciones pendientes, como el Consejo General del Poder Judicial, el Defensor del Pueblo, o el Tribunal Constitucional. Un acuerdo que, según el líder del Ejecutivo, Casado rompió “inexplicablemente”. Por su parte, el Partido Popular ha emitido un comunicado desmintiendo que hubiese un pacto casi cerrado “sólo dimos el ok al inicio de las negociaciones”.
Además, los populares han emitido un comunicado negando los rumores de que la destitución de Cayetana Álvarez de Toledo tuviera algo que ver en la ruptura de las negociaciones. El verdadero motivo fueron los ataques del vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, a la figura del Rey Felipe VI tras el anuncio de la Casa Real el día 3 de agosto de la marcha del Rey Juan Carlos I de España, recoge el texto.
El martes, el Gobierno afrontó su primera sesión de control de la Legislatura en el Senado y el miércoles hizo lo propio en el Congreso, donde se volvió a disparar el enfrentamiento entre Sánchez y el líder de la oposición. El presidente del Ejecutivo afeó de nuevo a Casado su negativa a llegar a acuerdos para renovar el Poder Judicial, y añadió que, si bien es cierto que Unidas Podemos propone cosas que están fuera de la Constitución “al menos cumplen con la Constitución, no como hacen ustedes”. Casado respondió acusando a Sánchez de engañar “masivamente” a los ciudadanos y añadió que “cuando quiera hacer algo bueno para los españoles nos tendrá delante, mientras tanto, nos tendrá de frente”.
El presidente del Gobierno, además, respondió a Vox sobre la gestión de la pandemia, cuando Abascal le calificó de “desastre con patas” y acusó de ser el líder “del peor Gobierno que ha tenido este país en 80 años”. El líder de ERC Gabriel Rufián se interesó por los incumplimientos en las ayudas anunciadas en la pandemia y quiso recordar a Sánchez que si se sienta a pactar con Arrimadas, estará volviendo a pactar con la derecha. “Eso de que no tiene importancia con quién se va a pactar con tal de aprobar los Presupuestos, es mentira”, ha recalcado.
Por otro lado, Cuca Gamarra se estrenó como portavoz parlamentaria del grupo popular preguntando a la vicepresidenta Carmen Calvo sobre la coordinación del Gobierno durante la pandemia. “Parece el camarote de los hermanos Marx” añadió en alusión a Podemos. La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, con ironía, respondió que no estaba viendo ningún cambio en la portavocía en cuanto a moderación.