C. B.
El Consejo de Ministros ha aprobado un Real Decreto Ley de nuevas medidas económicas para aumentar la protección a personas que vivan en una situación de vulnerabilidad y no puedan pagar de forma inmediata los gastos hipotecarios y por tanto, se encuentren en “riesgo de desahucio”.
La novedad de estas nuevas medidas es que antes la prórroga de la suspensión de lanzamientos sólo se hacía durante dos años, mientras que ahora se extiende a cuatro años, de tal manera que, según declaró la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, “hasta 2024 ninguna familia vulnerable será expulsada de su hogar porque se ejecute su hipoteca”.
Los principales requisitos que se exigen para ser considerados vulnerables son: familias en la que los titulares de la hipoteca estén en desempleo o tengan alguna persona con discapacidad o mayores de 60 años a su cargo; las familias monoparentales con un solo hijo; se considerarán en la moratoria los lanzamientos que correspondan a subastas adjudicadas tanto a acreedores bancarios como a cualquier otra persona física o jurídica, y el incremento del límite de renta de la unidad familiar para ser consideradas familias vulnerables.
Montero asegura que estas medidas se suman a las ya tomadas en 2019 en relación con el mercado del alquiler. Según está publicado en el Boletín Oficial del Estado, estas nuevas medidas han entrado en vigor desde este jueves.