
Sin Maldad / José García Abad
Es mucha la demagogia que se hace sobre la violencia de género, por lo que es de agradecer que el Instituto Nacional de Estadística (INE) haya publicado la semana pasada datos precisos al respecto atendiendo la recomendación de Don José Ortega y Gasset: que o se hace precisión o se hace literatura o se calla uno.
Me parece admirable este Instituto que siempre, con gobiernos del PSOE o del PP, ha hecho su trabajo pulcramente, sin ataduras a los intereses de quien nombraba a sus presidentes. El INE ha sabido mantener su independencia lo que, sin demérito de sus sucesivos presidentes, me permito atribuir a los excelentes estadísticos que allí trabajan.
Los mayores descensos en el número de mujeres víctimas de violencia de género se registraron en los meses en los que la movilidad estuvo restringida por la pandemia. El mayor descenso se dio entre las mujeres de menos de 18 años (–28,5%) y el mayor aumento se registró en las mujeres de 50 a 54 años, del 3,1%.
Ha descendido la violencia de género en un 8,4% que aun así afectó a 29.215 mujeres, pero la doméstica afectó a 8.279 personas, hombres o mujeres, un 8,2% más que en el año anterior: el 61,4% a mujeres y el 38,6% a hombres. Hubo más violencia que denuncias con una relación de 1,5 víctimas por cada persona denunciada. En la foto, el presidente del INE, Juan Manuel Rodríguez Poo
Como señala su actual presidente, el catedrático de Econometría de la Universidad de Cantabria, Juan Manuel Rodríguez Poo, “el Instituto Nacional de Estadística produce información estadística de la más alta calidad acerca de numerosos ámbitos como la economía, la sociedad y el medio ambiente, entre otros, para favorecer así la correcta toma de decisiones”.
En este caso, el INE ha desmontado algunos tópicos, incluso los que van alimentados por el “pensamiento correcto” y ha tenido el acierto de incluir no sólo la “violencia de género”, la que afecta a las mujeres, las más perjudicadas, sino también la “violencia doméstica” que incluye a hombres y mujeres que conviven en familia durante 2020.
Los datos son preocupantes. Ciertamente la de “género” disminuyó pero se incrementó la “doméstica”, que se manifestó en un 67% en lesiones y torturas. Fueron más los casos de violencia doméstica entre los inmigrantes, mayormente africanos y latinoamericanos, que entre los nacidos en España. La tasa de víctimas por cada 1.000 mujeres de 14 y más años fue casi tres veces superior en las nacidas en el extranjero que en las nacidas en España. En ambos casos las cifras fueron similares a las del año anterior
Destaca el lamentable hecho de la tardanza de los tribunales en llegar a una sentencia firme, aunque es menor cuando se refiere a la violencia sufrida por las mujeres.
En el triste ‘ranking’ autonómico de violencia doméstica destacan la ciudad autónoma de Ceuta, La Rioja, la Región de Murcia y la ciudad autónoma de Melilla. Me parece especialmente preocupante que haya más violencia que denuncias. Siguen siendo muchas las mujeres que son maltratadas que no se atreven a presentar denuncia.
La pandemia protegió a las jóvenes y castigó a las mayores
Los mayores descensos en el número de mujeres víctimas de violencia de género se registraron en los meses en los que la movilidad estuvo restringida por la pandemia. El mayor descenso se dio entre las mujeres de menos de 18 años (–28,5%) y el mayor aumento se registró en las mujeres de 50 a 54 años, del 3,1%.
En efecto, ha descendido la violencia de género en un 8,4% que aun así afectó a 29.215 mujeres, pero la doméstica afectó a 8.279 personas, hombres o mujeres, un 8,2% más que en el año anterior: el 61,4% a mujeres y el 38,6% a hombres. Hubo más violencia que denuncias con una relación de 1,5 víctimas por cada persona denunciada.
El número de infracciones penales imputadas a las personas denunciadas por violencia doméstica se elevó a 6.739, un 5,4% más que en el año anterior. Las infracciones penales más frecuentes fueron las relativas a lesiones (49,5% del total), amenazas (18,9%) y torturas y otros delitos contra la integridad moral (17,8%). Se dictaron 13.302 medidas cautelares lo que supuso un aumento del 7,4% respecto al año anterior.
El 72,6% de estas medidas recayeron sobre hombres y el 27,4% sobre mujeres, el 94,4% fueron medidas cautelares penales y el 5,6% cautelares civiles.
30.616 personas fueron condenadas por violencia de género y violencia doméstica, un 14,8% menos que en 2019. De ellas, 28.568 fueron hombres y 2.048 mujeres.
Hay que acelerar el ritmo de las sentencias
En violencia de género se dictó sentencia firme en menos de un año a siete de cada diez personas (el 71,1% del total). Por su parte, se dictó sentencia firme entre uno y dos años al 16,1% de las personas, entre dos y tres años al 7,5%, y en tres o más años al 5,3%. En violencia doméstica se dictó sentencia firme en menos de un año al 67,7% de las personas, entre uno y dos años al 18,8%, entre dos y tres años al 7,5%, y en tres o más años al 5,9%
En violencia doméstica registraron una tasa similar entre los hombres extranjeros y los españoles (ambos 0,14 por 1.000 habitantes). En el caso de las víctimas femeninas, las nacidas en el extranjero sufrieron una tasa más elevada que las nacidas en España (0,25, frente a 0,20). Las tasas más elevadas de víctimas fueron las de África en el caso de las mujeres (0,44) y las de América en el caso de los hombres (0,17).
Por comunidades autónomas, en tasa por cada 1.000 habitantes de víctimas, destaca en violencia doméstica sobre los hombres la Ciudad Autónoma de Ceuta (0,54), La Rioja (0,22) y Región de Murcia y la Ciudad Autónoma de Melilla (0,19 en las dos). En el caso de las mujeres, las mayores tasas se dieron en las ciudades autónomas de Ceuta (0,60) y Melilla (0,38) y en La Rioja (0,34).
En 2020 se registraron 5.578 personas denunciadas en violencia doméstica, un 3,4% más que en el año anterior. De ellas, el 72,2% fueron hombres y el 27,8% mujeres. Al igual que en el año anterior, se produjeron aumentos tanto en el número de hombres denunciados (3,7%), como en el de mujeres denunciadas (2,6%).
En términos relativos, las tasas por 1.000 personas de 14 y más años fueron más elevadas en las personas denunciadas nacidas en el extranjero, especialmente en las de África y América, tanto en los hombres como en las mujeres.
Las infracciones penales más frecuentes fueron las relativas a lesiones (51,8% del total), torturas y otros delitos contra la integridad moral (20,2%) y amenazas (15,2%). El total de medidas cautelares dictadas e inscritas en el Registro en asuntos de violencia de género durante 2020 fue de 90.912, un 8,2% menos que el año anterior.
Lleva ejerciendo la profesión de periodista desde hace más de medio siglo. Ha trabajado en prensa, radio y televisión y ha sido presidente de la Asociación de Periodistas Económicos por tres periodos. Es fundador y presidente del Grupo Nuevo Lunes, que edita los semanarios El Nuevo Lunes, de economía y negocios y El Siglo, de información general.