Javier Quintana
La inflación interanual descendió hasta el 3,2% el mes pasado, según el INE. El descenso del precio del gas a mínimos desde diciembre de 2021, el abaratamiento de la gasolina y el diésel y la buena evolución del mercado alimenticio han sido factores cruciales para alcanzar esta cota. La estabilización del cambio euro-dólar y el descenso del petróleo también han influido en esta deriva.
Sigue así la tendencia a la baja, que presagia que ya no se volverán a ver las cifras de 2022. No obstante, los analistas indican que aún habrá que esperar para volver a la normalidad. Lo que más preocupa a día de hoy es la inflación subyacente, que se mantiene en el 6,1%, y la cesta de la compra, aun habiendo experimentado esta una leve desescalada.
La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, ha destacado que los datos reflejan “la eficacia de las medidas del Gobierno” y que posicionan a España “como uno de los que tienen la inflación más baja de la Unión Europea”. El objetivo del 2% marcado por la Unión Europea parece cercano si pensamos en el efecto base. Se espera que el dato interanual mejore en los próximos meses estivales.
La posible prórroga de la rebaja del IVA a los alimentos básicos será también fundamental en los próximos datos inflacionarios.