J.Q.
El presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro, se encuentra esta semana realizando una visita oficial a España. El líder de izquierdas latinoamericano fue invitado al Congreso de los Diputados el pasado miércoles, donde dio un discurso después de ser recibido por Meritxell Batet, presidenta del Congreso, y Ander Gil, presidente del Senado, con el cambio climático como protagonista. «La ciencia dice que estamos en el comienzo de los tiempos de la extinción”, indicó Petro. Ante esto, insistió, de nada sirve “la política del avestruz”. Vox abandonó el hemiciclo ante la llegada de Petro, al que la formación liderada por Santiago Abascal tilda de “terrorista no arrepentido”. Abascal criticó que se ponga ahora “la alfombra roja” a un hombre que “ha insultado a este país”.
Tras su paso por la Cámara Baja, Petro asistió a un encuentro con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, donde el popular le hizo entrega de la Llave de Oro de la Villa de Madrid. Petro celebró entonces el reencuentro colombiano-español, alejado de la “relación de dominación y subyugación” del pasado, y destacó la “resistencia de Madrid ante el fascismo”. Almeida afeó después a Vox el “numerito” en el Congreso y pidió mantener la “cortesía institucional”, pese a que se considera “en las antípodas” de lo que el líder colombiano predica.
También Felipe VI recibió al político, en un encuentro donde deseó “el silencio de las armas” para Colombia y donde reivindicó “una relación de hermandad y respeto mutuo” entre los países de cara al futuro.
