¡Vaya Gente! / Mara del Prado
Algo bueno ha tenido en Buckingham Palace la huida de los duques de Sussex; su popularidad made in USA, casual y glamurosa, íntima y rodeada de estrellas invitadas, está obligando los duques de Cambridge a salir de su zona de confort.
Ser joven no basta para conectar con la generación millennial. Sobre todo si Kate insiste en llevar abrigos y faldas con todas las combinaciones posibles del estampado tartán, como si sobre sus hombros descansase el peso de todos los clanes de Escocia.
Además de ser joven, hay que parecerlo. O, al menos, intentarlo. Con ese afán de renovación, el príncipe Guillermo ha participado en la segunda temporada de Time to walk en Apple Fitness+, en un episodio grabado durante un paseo por Sandringham (Norfork) donde los Windsor pasan las navidades y el nieto de Isabel II tiene una casa de campo, Anmer Hall, señala Hola.
Durante 28 minutos, el futuro rey británico cuenta algunas de sus historias y canciones favoritas. La de sus hijos George, Charlotte y Louis es Waka waka de Shakira. “Hay muchos movimientos de cadera y muchos disfraces”, comenta divertido. La que más le recuerda a la princesa Diana, The best, de Tina Turner. De vuelta del colegio, sentados él y Harry en el asiento trasero del coche, era “un verdadero momento familiar. Mi madre conducía cantando a pleno pulmón” y “me trae muchos recuerdos”, confiesa.
El duque de Cambridge desvela también una anécdota de las que su hermano vive a diario allá en Montecito, el lujoso rincón californiano de las estrellas. “Estaba sentado junto a Taylor Swift […], me miró a los ojos y me dijo: ‘Vamos Guillermo. Vamos a cantar’ […]. Si te dice: ‘Ven conmigo’… Me levanté como un cachorro […]. Subí al escenario en trance y, luego más o menos a la mitad de Livin’ on a prayer, de Jon Bon Jovi, me despierto y pienso: ¿Estoy de pie en el escenario cantando Livin’ on a prayer cuando ni siquiera me sé la letra?”, contó rememorando su aparición ‘estelar’ en una gala benéfica.
Bon Jovi es más generación X, hasta boomer, si me apuras. Incluso Shakira, y no digamos ya Tina Turner. Pero Taylor Swift vale como cantante millennial. Bien, Guillermo, tú a tu ritmo. Lo bueno es empezar.