L.M.
España, Francia y Portugal han acordado dejar atrás el proyecto del Midcat, el gasoducto que pretenía unir la península Ibérica con Europa a través de los Pirineos, y sustituirlo por “un corredor verde de Energía” que pasará entre Marsella y Barcelona.
Los tres dirigentes han concretado volver a reunirse en diciembre para estudiar el reparto de costes y los plazos del proyecto que unirá energéticamente la Península Ibérica al resto del continente y que llevará el nombre de BarMar. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado, al concluir la reunión en Bruselas, que han planteado “la alternativa de Barcelona-Marsella” y “una tubería para hidrógeno y para la transición del gas que se necesite”. También ha expresado que el conducto marítimo supone una “muy buena noticia para España, para Portugal, Francia y Europa”.
El “corredor verde” llevará hidrógeno, la energía del futuro según los expertos, y de forma temporal también el gas que necesite el mercado energético europeo en el contexto actual de crisis energética derivada de la guerra de Ucrania.