Destacado Económico / N. L.
El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón acogió la petición de La Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, simplemente la Fiscalía Anticorrupción, de añadir el delito de administración desleal a la investigación instruida por este juez sobre el espionaje encargado por el anterior presidente del BBVA al excomisario José Manuel Villarejo a numerosas personalidades para salvaguardar su sillón presidencial cuando Sacyr Vallehermoso, dirigido por Luis del Rivero desde 2004 al 2011, intentó hacerse con el control del BBVA.
Esta última imputación enfrenta en feroz contienda jurídica al exfiscal y ahora abogado de FG, Jesús Santos, con el fiscal anticorrupción Miguel Serrano, ayudado por el joven asturiano Alejandro Carbaleiro, 42 años, que sólo lleva un año en la Fiscalía Anticorrupción, pero que no le falta experiencia; desde enero de 2013 fue el fiscal delegado de Medio Ambiente y Urbanismo de Asturias, labor que compaginó con el despacho de asuntos de la jurisdicción contencioso-administrativa y mercantil.
Miguel Serrano no se casa con nadie
Miguel Serrano, de 64 años, que investiga desde hace más de cuatro años el mayor entramado de corrupción política, policial y empresarial, ha hecho desfilar junto a Stampa por la Audiencia Nacional a empresarios, banqueros, políticos, policías y lo ha intentado con el rey Juan Carlos.

A Ignacio Stampa, hijo de José María Stampa Braun, fallecido, que fue un prestigioso catedrático de Derecho Penal, que (Ignacio) había acumulado muchos odios y el amor seguido de enemistad de Pablo Iglesias, se lo cargaron de la Fiscalía Anticorrupción y lo intentaron contra Serrano, que sufrió un empate en el Consejo Fiscal donde fue apoyado por la Unión Progresista de Fiscales (UPF) un empate no vinculante pero de mucha consideración por quien tiene la última palabra, que en este caso era la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, que decidió mantener a Serrano.
Éste no se casa ni siquiera con el juez Garcia-Castellón contra quien presentó en la Audiencia Nacional una apelación por el cierre de la investigación del operativo, supuestamente regado con fondos reservados, para robar y destruir las pruebas que tuviera el extesorero del PP, Luis Bárcenas, contra el PP o sus dirigentes en la causa judicial de su caja B. Los fiscales Miguel Serrano y César de Rivas acusaban al juez Manuel García-Castellón de clausurar de forma «precipitada y en falso» la causa y de querer «artificialmente delimitar el procedimiento al Ministerio del Interior».
Añadían los fiscales que «las posibles responsabilidades del presidente del Gobierno y de los dirigentes del PP no quedan fuera del procedimiento» y que «no es la primera ocasión que en el curso de las actuaciones aparecen elementos que confluirían en una posible responsabilidad de éste.
Santos, uno de los abogados más ricos
Jesús Santos, procedente del Cuerpo Jurídico Militar, fue un peso pesado en la Fiscalía donde ingresó en 1989, donde fue el preparador del fiscal Ignacio Stampa, y donde conserva muchos apoyos.
José María Aznar le colocó de número dos de la Audiencia Nacional por delante de Ignacio Gordillo, de mayor antigüedad, en la actualidad abogado con bufete propio. En el año 2004, Ángel Acebes, a la sazón ministro de Justicia, nombró a Santos juez de enlace en Italia un apetecible puesto del que fue cesado en septiembre de 2011 por el ministro socialista Francisco Caamaño. Se da la circunstancia de que Mariano Rajoy nombró para sustituirle de su puesto romano a Manuel García-Castellón, que es en la actualidad el juez del ‘caso Tándem’ que se ocupa de los posibles delitos de la combinación FG/Villarejo.
Jesús Santos abandonó su función pública en el año 2012 para convertirse en uno de los abogados más ricos del país como miembro señalado del bufete Baker & Mckenzie. Miembro supernumerario del Opus Dei, Santos cuenta entre sus clientes, además de Francisco González, con el Partido Popular, el magnate ruso Mijail Friedman, y el futbolista Neymar, entre otros personajes.
El juez añade la administración desleal de FG y la defensa se opone
El pasado 20 de julio Manuel García-Castellón, a instancias de la Fiscalía Anticorrupción, decidió añadir a los delitos de cohecho y revelación de secretos por los que se le investiga desde 2019, en el marco de la macrocausa FG/Villarejo, investigar a FG por el de administración desleal por usar recursos propios del banco para cuestiones personales, como la valoración registral de unas fincas sobre las que tenía intención de adquirir en El Escorial (Madrid).
La defensa del expresidente de BBVA presentó un recurso en el que criticaba al juez por no argumentar suficientemente por qué ampliaba la imputación, en el que advertía que Anticorrupción no puede acusar a González ni por el delito de administración desleal contemplado actualmente en el Código Penal, ya que no se encontraba vigente en el momento de los hechos, ni por el entonces en vigor, puesto que requiere de la denuncia de un perjudicado que en este caso no existe.
García-Castellón rechaza el recurso
La imputación a Francisco González por administración desleal se mantiene. El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, instructor del ‘caso Tándem’, siguiendo los argumentos de los fiscales Serrano y Carbaleiro, rechazó el recurso presentado por la defensa señalando que, debido a la «fase embrionaria» en la que se encuentra la investigación, no se requiere una exigencia plena de determinación y concreción. Que en este momento procesal, la instrucción, es suficiente con una exposición sucinta de los hechos investigados, pues el principal objetivo a perseguir es «delimitar, concretar, perfilar y precisar los hechos objeto de investigación» por lo que es esencial tomar declaración a González.
El auto notificado el 22 de septiembre insiste en que existen indicios de que González podría haber participado en una «operativa sospechosa» relacionada con encargos al Grupo Cenyt –el entramado empresarial de Villarejo– para la valoración de unas fincas, «y que tales servicios se habrían sufragado con los fondos sociales» del banco. Descarta que la imputación sea «prospectiva», pues estos indicios se encuentran dentro de la novena pieza del ‘caso Tándem’, relacionada con la contratación por parte de BBVA al comisario jubilado, en la que el expresidente de la entidad se encuentra imputado.
Afirma el juez que la defensa de González «olvida» que el artículo del anterior Código Penal –el vigente en el momento de los hechos– en el que se apoya para asegurar que es necesaria una denuncia para actuar por un delito de administración, también señala que dicho requisito no es exigible “cuando la comisión del delito afecte a los intereses generales o a una pluralidad de personas” como es el caso de una entidad bancaria de gran relevancia, que cotiza en el Ibex-35, con una multitud de accionistas, uno de los principales bancos de este país. En este sentido –remata– “el riesgo reputacional de semejantes conductas sí que afecta, de modo directo, a los intereses generales de aquéllos, así como al interés general» por lo que en este supuesto no es necesaria la denuncia del perjudicado.
Con Derecho a Réplica / Rafael Ordovás Gómez-Jordana. Consejero Delegado de Eurocofín
La confianza de los consumidores repunta en 2021
La pandemia del coronavirus inició una tendencia a la baja en el primer trimestre de 2020 en el Índice de Confianza del Consumidor (ICC), que comenzó a recuperarse a partir del segundo trimestre.
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) se calcula como una media aritmética de los balances de la situación actual de la economía familiar, de la economía española y del empleo, respecto a la que existía hace seis meses y de las expectativas respectivas para los próximos seis meses.
Los índices pueden oscilar entre 0 y 200 puntos. Por encima de los 100 puntos, la interpretación es positiva por parte de los consumidores, mientras que por debajo de esa cifra es negativa.
El ICC del mes de agosto alcanza los 91,6 puntos, lo que representa 0,4 puntos menos que el dato del mes anterior. En relación con el mes de agosto del año anterior, el ICC representa 41,7 puntos más, es decir, la tasa interanual registra un aumento de 83,3% con relación al mismo mes de agosto de 2020, mostrando una clara evolución positiva.
No obstante, la evolución trimestral es negativa en el corto plazo. Este descenso del índice se debe a la evolución experimentada por sus dos componentes: aunque la valoración de la situación actual se valora 4,3 puntos más que en el mes de julio, la valoración de las expectativas cae 5,1 puntos.
La media anual del ICC en 2021 asciende a 69,93 puntos, registrando los valores más altos desde 2019.
Cabe destacar que, comparado con el año previo a la pandemia, nos encontramos con que en agosto de 2019 el ICC era de 86 puntos, con lo cual la evolución sigue siendo positiva, mostrando en agosto de 2021 un aumento de 5,6 puntos respecto a las cifras registradas hace dos años.
Situación actual y expectativas sobre precios, tipos de interés, ahorro y consumo
El Índice de Situación Actual alcanza en agosto 77,9 puntos, con un aumento de 4,3 puntos en relación con el obtenido el pasado mes de julio. Este incremento del índice se debe a la evolución de las valoraciones positivas de dos de sus tres componentes: la valoración de la situación económica actual sube 8,4 puntos respecto al mes anterior, la valoración del mercado de trabajo aumenta 7,1 puntos respecto al mes de julio, y en el caso de la valoración de la situación de los hogares hay una pérdida de 2,6 puntos en el último mes.
Las valoraciones de la situación económica y del mercado de trabajo de este mes de agosto son las mejores obtenidas desde el tercer trimestre del 2019.
Comparando con los datos de agosto del 2020, la evolución es muy positiva en todos sus componentes. Incluso si se compara con agosto de 2019, cuando no había pandemia, la evolución sigue siendo positiva.
La valoración de la situación económica aumenta 66,8 puntos, las opciones que ofrece el mercado de trabajo se valoran 58,4 puntos por encima del valor de hace un año y la valoración de la situación en los hogares mejora 19,2 puntos en los últimos doce meses. Si analizamos la evolución en términos relativos, las diferencias son muy llamativas: la valoración de la situación económica general ha aumentado un 750,5%, la valoración de
las posibilidades del mercado de trabajo sube 400% y la valoración respecto a la situación de los hogares crece de manera más moderada, el 29,2%.
Adicionalmente, si comparamos el Índice de Situación Actual con el año previo a la pandemia, nos encontramos con que en agosto de 2019 el índice era de 83,1 puntos, lo que supone un descenso de 5,2 puntos en agosto de 2021.
En cuanto al Índice de Expectativas, en agosto de 2021 fue de 105,2 puntos, lo que representa un descenso de 5,1 puntos respecto al mes anterior. Este retroceso se debe a la evolución de sus tres componentes: la valoración de la evolución de la economía en el futuro inmediato asciende a 102,9 puntos, disminuyendo 5,8 puntos respecto a julio, la valoración del futuro del mercado de trabajo se eleva en el mes de agosto a 101,7 puntos, perdiendo 7,9 puntos respecto al mes anterior y la futura evolución de la situación de los hogares permanece prácticamente igual, con un ligero descenso de 1,5 puntos, llegando a 111,1 puntos en el mes de agosto.
Al igual que la evolución interanual del ICC y del Índice de Situación Actual, la evolución del Índice de Expectativas en términos interanuales también es positiva en sus todos sus componentes.
Desde agosto del pasado año, en términos relativos, el aumento de las expectativas respecto de la situación económica general crece un 85,1%, las expectativas referidas al empleo tienen una subida del 58,4% y la valoración futura de la situación de los hogares asciende un 22,6% en el último año.
Finalmente, y como información adicional al ICC, la evolución de las expectativas en relación con los precios, los tipos de interés, las posibilidades de ahorro de los hogares y la compra de bienes duraderos muestra un desarrollo coherente con las pautas y los datos comentados hasta ahora sobre el ICC. En términos mensuales, se observa un descenso en las expectativas de ahorro que bajan 1,3 puntos y también las expectativas sobre un futuro aumento de los tipos de interés que se reducen 0,8 puntos respecto al mes anterior. Por otro lado, los temores de inflación aumentan 1,5 puntos y las expectativas de consumo se mantienen exactamente igual que en el mes de julio.
Tal y como ocurría con el ICC y el Índice de Situación Actual, la evolución trimestral de los tres componentes de este índice, muestran una evolución ligeramente negativa, mientras que es positiva en términos interanuales.
Por último, el Índice de Expectativas en agosto de 2021 aumenta en 16,3 puntos, respecto al registrado en agosto de 2019, que fue de 88,9 puntos.
Evolución de los índices en 2021
— El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) del mes de agosto alcanza los 91,6 puntos, lo que representa 0,4 puntos menos que el dato del mes anterior. En relación con el mes de agosto del año anterior, la tasa interanual registra un aumento de 83,3%.
— El Índice de Situación Actual alcanza en agosto 77,9 puntos, con un aumento de 4,3 puntos en relación con el obtenido el pasado mes de julio. Comparando con los datos de agosto del 2020, la evolución es muy positiva en todos sus componentes.
— En cuanto al Índice de Expectativas, en agosto de 2021 fue de 105,2 puntos, lo que representa un descenso de 5,1 puntos respecto al mes anterior. Al igual que la evolución interanual del ICC y del Índice de Situación Actual, la evolución del Índice de Expectativas en términos interanuales también es positiva en sus todos sus componentes.
— Podemos concluir que los consumidores han recuperado la confianza, con cifras mayores que las registradas en el año previo a la pandemia. Tanto el ICC como el Índice de Situación Actual han mostrado una evolución positiva, con excepción del Índice de Expectativas, que muestra un leve descenso al compararlo con el mismo período de 2019.
Conclusiones
— La pandemia del coronavirus provocó un desplome en la confianza de los hogares españoles que comenzó a recuperarse en el último trimestre del año.
— Las valoraciones de la situación económica y del mercado de trabajo de este mes de agosto son las mejores obtenidas desde el tercer trimestre del 2019.
— Durante 2021, la evolución de los tres índices ha sido claramente positiva, con un ligero descenso de julio a agosto.
— No obstante, cabe considerar que las valoraciones de la situación económica y del mercado de trabajo de este mes de agosto son las mejores obtenidas desde el tercer trimestre del 2019.
— Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de ahorro de los hogares se situó en el 4,9% de su renta disponible en el primer trimestre de 2021 (últimos datos disponibles). Este dato supone una variación de 3,1 puntos porcentuales a la del mismo trimestre del año anterior.
— En cuanto al ahorro generado por los hogares y las instituciones sin ánimo de lucro, este alcanzó en el primer trimestre de 2021 los 8.505 millones de euros, que supone una variación de 164,71% con respecto al mismo periodo del año anterior, y mostrando el valor más alto de toda la serie, iniciada en 1999.