Ricardo Martín.
A José Félix Tezanos Tortajada (Santander 1946) se le observa relajado, como el marino que después de afrontar vendavales, tormentas y olas de varios metros disfruta de una encalmada; incluso puede felicitarse de la última macroencuesta del CIS, menos criticada que sondeos anteriores, cuyas proyecciones colocan al PSOE seis puntos por delante del PP si hoy se celebraran elecciones municipales, y tres puntos por delante del partido de Feijóo si hoy votáramos en generales.
El veterano socialista, nombrado Presidente del CIS en junio de 2018, nunca ha perdido las formas, a pesar de haber sido sistemáticamente vilipendiado desde el mismo día en que fue elegido por Pedro Sánchez para presidir el CIS. Se le acusa de ser miembro del PSOE, pero quizás sus críticos deberían conocer su acervo profesional, elogiado por sociólogos de verdadero prestigio como Pedro Arriola (1948-2022), que se avergonzaba de sus clientes de Génova, 13 (el Partido Popular), por sus invectivas contra uno de intelectuales de izquierda más solventes de nuestro país, con setenta libros publicados hasta la fecha.
Tezanos, uno de los artífices del resurgimiento del PSOE en la Transición, recuerda sin nostalgia la victoria del 82 y considera que el actual Gobierno es el más alineado de los que han dirigido presidentes socialistas (González, Zapatero y Sánchez) con la corriente económica y cultural mayoritaria en estos momentos en el mundo, de Iberoamérica a los países nórdicos, pasando por Alemania y los Estados Unidos.
¿Cómo ha vivido el 40 Aniversario de la victoria socialista de 1982, qué reflexiones ha realizado a la vista de este período de gobiernos socialistas desde Felipe González a Pedro Sánchez, pasando por Rodriguez Zapatero?
Es curioso, porque el ciclo que se inaugura en 1982 es un ciclo que iba a contrapié de lo que se demandaba y se estaba haciendo en Europa en ese momento. Hemos tenido tres presidentes de Gobierno excelentes. Eso lo reconoce todo el mundo, incluso los votantes de otros partidos. Han hecho una tarea positiva en las circunstancias difíciles en las que se han encontrado. Sin embargo, lo que diferencia el ciclo actual es que yo creo que España está más en la sintonía de lo que se necesita y se está haciendo en el mundo en este momento. Desde EEUU, muchos países nórdicos, Alemania, otros países centroeuropeos, incluso Francia; o Portugal, por supuesto, están en un ciclo en que se ven en la necesidad de algo parecido a lo que fue el consenso keynesiano –con todas las diferencias que marca el tiempo- ; y, desde luego, un mayor peso de las posiciones progresistas, que no solo son las socialistas: posiciones que entienden que en momentos de conflicto, de tensión, de incertidumbre, el Estado tiene que tener un papel, un Estado siempre democrático por supuesto, tiene que tener un papel de protección, de amparo, de atender los problemas sociales y de intervenir para evitar los destrozos extremos que puede causar una economía desbocada. En cualquier caso, desde el punto de vista de la demoscopia, que es de lo que yo pretendería hablar en este momento, hay que entender siempre que las situaciones son abiertas.
Los últimos sondeos publicados por los Medios de Comunicación, no sólo el último del CIS, diagnostican un estancamiento –o caída, según se mire- de las expectativas del Jefe de la Oposición y un repunte firme de Pedro Sánchez: ¿cuándo comenzó el estancamiento de Feijoo y cuáles son las razones que usted considera principales?.
La realidad es que después del Congreso del PP, de la manera que se hizo, el cambio y los apoyos, la verdad es que durante tres meses en las encuestas del CIS el PP aparecía por delante del PSOE en intención directa de voto, y Feijoo también aparecía por delante en valoraciones. Eso ha durado poco tiempo, porque ha habido un declive de ese liderazgo que ya registran casi todas las encuestas. ¿Qué razones explican esto?.
“PP y VOX no han tenido mayoría de Gobierno en España en ningún momento”.
Pues, probablemente (eso habría que estudiarlo mejor), probablemente hay una insatisfacción del electorado, frustración de expectativas, y probablemente errores en los mensajes y en su comportamiento. Todavía no hay encuestas que reflejen la reacción de los ciudadanos sobre la negativa a llegar a un acuerdo para la renovación del CGPJ, pero eso también puede influir decisivamente.
¿Está en peligro la suma de PP y VOX para hacerse con La Moncloa?. ¿Podrían sumar más porcentaje y escaños los partidos de la izquierda y la mayoría de Gobierno en los próximos meses?. ¿Cuál es la tendencia de las mayorías de gobierno en España en estos momentos?.
En realidad, PP y VOX a nivel nacional no han formado mayoría en ningún momento. En algunas Comunidades Autónomas han formado mayoría y han conformado gobiernos, con los resultados que estamos viendo; pero no a nivel nacional. Yo creo que en este momento, tal como se producen los comportamientos y los alineamientos políticos ideológicos, hoy por hoy no suman mayoría. España no es un país de extrema derecha ni de derecha muy radicalizada, España es un país que se sitúa más bien en el centro, centro-izquierda. La gran mayoría de los electores están en esas posiciones. Lo que puede ocurrir es que algunas veces la abstención se cebe especialmente en los sectores moderados de la izquierda; y lo que sí han conseguido –VOX sobre todo- es movilizar a un electorado que hasta que ellos llegaron generalmente era abstencionista, que eran los franquistas más ultras que no tenían ningún partido con el que identificarse, y han movilizado eso. Y no es una subjetividad mía, los datos sociológicos de las encuestas -que están muchos de ellos en el banco de datos del CIS para que se puedan analizar-, pues detectan y confirman ese fenómeno.
El repunte del voto socialista ha sido una sorpresa para buena parte del electorado, probablemente incluso para el electorado del PSOE. ¿Cuáles han sido las causas de que Pedro Sánchez esté remontando en la práctica totalidad de los sondeos desde hace unas semanas?.
Las razones de la mejora de las expectativas del PSOE las encontramos en el contexto internacional. Es decir, se sabe que otros gobiernos de Europa, incluso del mundo, tienen una valoración realmente muy positiva de este Gobierno y de lo que está haciendo.
“Las razones de la mejora de las expectativas del PSOE las encontramos en el contexto internacional»
Y, entonces, esa valoración positiva internacional también llega a una parte de la opinión pública española, pero en el caso de España esa opinión pública hay que tener en cuenta que está muy mediatizada por el sistema de información. Porque el sistema de información en España, lamentablemente, está muy sesgado a la derecha.
¿Qué es lo que más destacan los españoles de la gestión del Ejecutivo de Pedro Sánchez, y que es lo que le exigen para darle su apoyo en el siguiente ciclo electoral?
Bueno, yo creo que los españoles perciben que hay un Gobierno que, aunque parezca paradójico en este momento, es un Gobierno que gobierna. Probablemente lo que demanden es más decisión en la adopción de medidas que favorezcan más a los sectores más necesitados, al tiempo que se mantiene una buena funcionalidad económica. El dilema de crecer o repartir, que algunos plantean, es un falso dilema. Si no repartes estás cometiendo injusticias y si repartes más allá de lo que se puede no estás creciendo… El equilibrio entre crecimiento y reparto y política social es la clave de la política. Ahí hubo una etapa gloriosa, yo creo, en la historia europea que fue la etapa de los años de consenso keynesiano, que todo el mundo entendió, después de los años terribles de la Gran Depresión, de la Guerra Mundial, el destrozo de la violencia de unos contra otros, que lo más sensato era sentarse, llegar a acuerdos razonables y seguir por la vía de lo que es razonable y que demandan las grandes mayorías sociales; que lo que quieren es solvencia, capacidad de gobierno, y conocimientos. Y eso, que la mayoría identifica en este momento con el gobierno actual, probablemente es lo que están recogiendo las encuestas que vamos conociendo.
¿Cree que el Presidente del Gobierno empieza a “pescar” votos en otros caladeros que hasta ahora eran terreno abonado para el Partido Popular?.
El PSOE viene de unas intenciones de voto muy importantes, sobre todo desde las elecciones de 1982. Y tiene un espacio bastante amplio que cubre un espectro que va desde una izquierda de carácter esencial, de principios, hasta un centro izquierda moderado que entiende que en determinadas coyunturas se requiere el papel del Estado, el papel de lo social y de lo público.
“El sistema de información en España, lamentablemente, está muy sesgado a la derecha»
Y, además, el hecho de que el PSOE haya sido el partido que haya tenido una orientación más congruente en temas fiscales (que paguen más los que más tienen…), le identifica positivamente en un espectro muy amplio de la opinión pública. Desde luego, el PSOE tiene su techo, como hemos visto, que no ha sobrepasado nunca el cuarenta y tantos por ciento del voto, pero que también tiene un suelo muy potente, del veintidós, veintitrés o del veinte por ciento. Se mueve en ese escenario, dependiendo un poco del valor de sus liderazgos, de la coherencia de sus proyectos… pero siempre ha sido un partido de Gobierno.
¿Es posible para Pedro Sánchez atraer a electores abstencionistas o indecisos de aquí a los procesos electorales que tendrán lugar a lo largo de 2023?.
Yo creo que sí. El problema muchas veces en España es que los debates forzados por aquellos que toman esas decisiones se van hacia cuestiones que no interesan mucho al ciudadano medio. Entonces, algunos debates muy formalistas o que escapan al conocimiento público como puede ser si se renueva o no se renueva el Consejo General del Poder Judicial… no son los debates atractivos para el electorado del PSOE, que cumple con la Constitución y la legalidad. Es el partido más constitucionalista de este ciclo político. Entonces, claro, hay un electorado que lo que más demanda son políticas sociales, políticas de protección. Tenemos un problema con los jóvenes, que es el empleo y la calidad del empleo, sus ingresos. Pero yo creo que hay mucha potencialidad todavía, hay un espacio muy grande ahí. De gente, de familias en las que en algún momento se ha votado al PSOE. Queda mucho recorrido.
El espacio a la izquierda del PSOE parece seguir “plano”. ¿Se debe a que Yolanda Díaz no afianza su liderazgo o quizás a disputas internas en Unidas Podemos?.
A veces no se valora suficientemente su potencialidad y su papel en España. Me refiero a ese espacio a la izquierda del PSOE, que fue muy importante en la Transición y en aquellas primeras elecciones en que el PCE ya se situó entonces en torno al 10%. El 10-12% es lo que tuvo Anguita en sus buenos años… El hecho de que haya buenos líderes de Izquierda Unida y de Podemos en estos momentos ha permitido que cristalice, e incluso que hayan llegado más allá. Aunque yo creo que tienen ese techo, si tuvieran la capacidad de conjugarse y ponerse de acuerdo, y plantear algo innovador, yo creo que sí, que tienen más posibilidades de las que dan hoy en día las encuestas.
En cuanto a Ciudadanos, ¿corre el riesgo de desaparecer como fuerza política parlamentaria?.
Es posible. Eso forma parte de la paradoja del centro político en España. Siendo un país donde hay bastantes centristas, no hay ningún partido que acabe de cuajar. Por eso hemos visto unos cuantos partidos que pasaron por ahí, como la primera UCD, que gobernó e hizo cosas positivas en el escenario político español; aunque luego se vino abajo… Luego el partido, CDS, que reconstruyó el propio Adolfo Suárez, pues también tuvo un ciclo muy pequeño. Posteriormente, el partido que montó una antigua miembro del PSOE –Rosa Díaz- pues también se dividió en muy poco tiempo.
“¿Ciudadanos…? falta en España un partido genuinamente liberal y centrista»
Ahora, el partido de Ribera, que llegó a tener un voto muy importante y que parecía que podría competir con el PP, pues también se ha diluido. Hay una tragedia ahí probablemente, porque no logran sintonizar. No sé si yo debiera decir esto, pero yo creo que el centro en España el problema que ha tenido es que no ha conseguido acertar a situarse realmente en el centro; y que tiene una deriva –como pasa con las embarcaciones a veces- natural a la derecha y acaban al final en el mismo espacio del PP y entonces desaparecen. Pero falta un partido en España genuinamente liberal, centrista… El corte que supuso el franquismo ha supuesto que en España ese espacio no tenga representantes, formado por liberales conscientes, pensadores, gente de nivel… Bueno, es una de las disfunciones más evidentes que tiene nuestro sistema electoral en este momento. Más bien el resultado del sistema electoral, no el sistema electoral en sí.
¿Cree que la “partida” de las autonómicas se juega en la Comunidad Valenciana y Madrid como señalan algunos politólogos?.
Yo creo que eso es muy difícil de acotar tan escuetamente. En Madrid venimos de un ciclo político en el que el PSOE tuvo mayorías muy grandes, con Tierno Galván sobre todo. Luego hemos tenido oscilaciones y el último que ganó, con una posible alianza para una mayoría de izquierdas en Madrid, fue Rafael Simancas. Lo cual revela que en Madrid existe esa potencialidad. Luego ocurrió lo que todos sabemos… Yo creo que el PSOE va a presentar un tándem, junto con el actual secretario general de Madrid, Juan Lobato, que me parece que tiene bastantes posibilidades de recuperar espacios.
Si el PSOE presentara una candidatura de peso para la Alcaldía de Madrid, ¿cree que el PP cambiaría a Almeida por otro candidato de más enjundia para evitar su derrota?.
Pues… es posible. También depende de los apoyos internos que tenga Almeida dentro de su propio partido y de las posturas que pueda adoptar en este conflicto, pero en todo caso parece que vuelve a verse una competencia interna en el espacio del PP.
“El CIS suele ser el primero en detectar los cambios que se producen en el electorado”
Supongo que le mueve a una cierta ironía observar cómo las empresas privadas de sondeos van acercándose en sus previsiones a los datos que se desprenden del último sondeo del CIS…
Bueno, yo no me planteo satisfacción… o cuestiones subjetivas. En el CIS se han hecho siempre bien los estudios, y yo, personalmente, he intentado hacerlos bien, con la máxima objetividad. Engañarse en un estudio sociológico es más bien de personalidades un poco tontas, porque eso no sirve para nada. Y la verdad es que, siempre, el CIS por la amplitud de las muestras que utiliza y por la metodología rigurosa que aplica, suele ser el primero en detectar los cambios que se producen en el electorado. De modo que siempre hemos visto a lo largo de la historia del CIS y de la demoscopia en España que, progresivamente, otras encuestas que son más reducidas, menos fiables, con muestras más pequeñas, se han ido alineando progresivamente con las encuestas del CIS.