Javier Quintana
Sigue el baile de nombres a escasos días de que el PSOE haga público su candidato para las próximas elecciones a la Alcaldía de Madrid. Mercedes González, delegada del Gobierno en la capital, se ´cae´ de unas quinielas donde ministros en horas bajas como Fernando Grande Marlaska o Reyes Maroto ganan posiciones para dar la cara en unos comicios ‘malditos’ para los socialistas desde hace décadas y en los que figuran como perdedores según todos los sondeos.
Faltan siete meses para las elecciones municipales, y en Ferraz ya se preparan para anunciar al elegido para hacer frente a José Luis Martínez-Almeida en la pugna por el Ayuntamiento de Madrid. Los socialistas llevan 33 años sin gobernar en la capital, y la nueva cita electoral vuelve a dar dolores de cabeza a la cúpula de Ferraz. Muy lejos quedan ya aquellos años felices donde la popularidad de `el viejo Profesor´, Enrique Tierno Galván, en la urbe madrileña traspasaba las fronteras de nuestro país.
Tras el mandato de Juan Barranco, que aprovechó la inercia del Profesor para ganar las elecciones de 1987, los fracasos socialistas se han ido sucediendo en las últimas décadas. Fernando Morán (1999), Trinidad Jiménez (2003), Miguel Sebastián (2007) y Jaime Lissavetzky (2011) sucumbieron ante la derecha en sus respectivas citas con las urnas. Antonio Miguel Carmona (2015) tampoco logró la alcaldía, aunque pudo contribuir con sus nueve concejales a la investidura de Manuela Carmena. En 2019 el presidente Sánchez trató de dar un golpe de efecto con el nombramiento del popular Pepu Hernández como candidato. Sin embargo, la jugada culminó con los peores resultados que los socialistas han cosechado en la capital en toda su historia.
`Nadie quiere venir a perder´
Una vez más, la elección del candidato madrileño se convierte en un problema para el partido. La opción de un `paracaidista´ de escasa popularidad no encaja con la intención del PSOE de mejorar sus resultados en el ayuntamiento más importante del país. La intención de Ferraz es que quien se presente, pese a salir derrotado, ocupe su lugar en el Ayuntamiento para hacer oposición a Almeida durante la próxima legislatura. Además, un buen resultado en la capital sería un buen refuerzo para las elecciones nacionales de final de 2023.
“Es una persona que va a dar un paso importante en su vida. Una persona que va a pasar de la responsabilidad que tiene ahora, a esta, absolutamente ilusionante, que es suceder a Enrique Tierno Galván y Manuela Carmena, y dirigir un proyecto de ciudad ambicioso, de progreso y futuro”, ha explicado Juan Lobato, secretario general del PSOE-M.
Así pues, los socialistas buscan un perfil que se adecúe a esta difícil tarea. Desde el partido apuntan que el elegido ocupa o ha ocupado puestos de gran responsabilidad, por lo que la hipótesis de que un miembro del Gobierno abandone su cargo para recalar en Madrid es una gran posibilidad. Sin embargo, no es fácil convencer a una figura importante del partido para que abandone su puesto en pos de una derrota casi segura. Es más, tal vez ni siquiera para el propio Gobierno sería aconsejable prescindir de alguno de sus pilares para relegarlo a un puesto de concejal en la capital.

Pilar Llop, ministra de Justicia, ya se ha autodescartado para la vacante. “Yo soy independiente, no pertenezco a ningún partido político (…) Le puedo asegurar que ese escenario no se va a producir”, ha explicado la ministra ante la cuestión de una posible candidatura. Félix Bolaños, ministro de Presidencia, hizo lo propio la pasada semana. En este caso, pese a que su nombre ha estado en la palestra las últimas semanas, se antojaba difícil que uno de los ministros que actualmente ostenta más poder en el gobierno de Sánchez bajara al barro de las municipales para obtener una derrota.
Madrid, acomodo para ministros salientes
Parece probable que, si el candidato finalmente sale del Gobierno, se tenga en cuenta una futurible remodelación del Ejecutivo en la que ya estaría pensando el presidente. En el hipotético caso de un cambio en el equipo de Sánchez de cara al último año de legislatura o de una posible crisis de Gobierno, figuras como la de Fernando Grande-Marlaska, Reyes Maroto o Margarita Robles parecen tener menos recorrido en el panorama nacional que, por ejemplo, el propio Bolaños. En este sentido, la capital podría dar salida a alguno de estos nombres.
En el caso de Marlaska, el ministro del Interior ha eludido posicionarse al respecto de una posible candidatura. “Que yo siga siendo ministro del Interior sólo depende del presidente”, ha sentenciado. Reyes Maroto, por su parte, es quien más a gusto parece encontrarse en esta quiniela. La ministra de Industria ha hecho compañía a Lobato, candidato socialista a la Comunidad de Madrid, en varios eventos municipales. Sin embargo, en el partido son conscientes de que no tiene el tirón electoral de otros candidatos.

En cuanto a Robles, la actual ministra de Defensa ya ha repetido en varias ocasiones que “no se ve” aspirando a la alcaldía madrileña. Sin embargo, su nombre es uno de los que más suena en Ferraz para el puesto. La aragonesa Pilar Alegría, ministra de Educación, es otra posibilidad que se plantean en la sede socialista.
Por otro lado, uno de los nombres que más interés popular suscitó en las últimas semanas y que podría haber sido una petición personal de Pedro Sánchez, el poeta Luis García Montero, ya ha sido descartado después de que el propio escritor desmintiera los rumores sobre su posible candidatura. «Nadie me lo ha propuesto y además, quien me lo podría proponer sabe que ni yo estoy en un momento para presentarme y sabe que yo no tengo condiciones para ser el alcalde», explicó Montero hace un par de semanas en una entrevista a El Intermedio.
Mercedes González, descartada
La delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, ha perdido prácticamente todas sus opciones de ser escogida. Según ha podido saber EL SIGLO de fuentes bien informadas del PSOE-M, Lobato habría perdido su confianza en ella. En la federación madrileña del PSOE critican la `dejadez´ de González en los últimos tiempos a la hora de dejarse ver en la ciudad y de ‘trabajarse’ el perfil de candidata. “Desde el despacho uno no se vuelve candidato”, afirman fuentes socialistas haciendo alusión a la opinión de Lobato respecto a González.
Desde el PP, Martínez-Almeida se ha mostrado despreocupado respecto a la elección de su futuro adversario. “El PSOE en la ciudad de Madrid va a sacar un mal resultado electoral sea quien sea su candidato. Pedro Sánchez va a tener que cazar a lazo a su candidato porque no quiere venir absolutamente nadie por la expectativa electoral. Vienen a perder y lo más que pueden conseguir es superar a Más Madrid”, ha opinado el alcalde.
En definitiva, el candidato que Ferraz podría tener ya cerrado será alguien con un buen bagaje político a sus espaldas. De momento todo son especulaciones hasta que en los próximos días, con el visto bueno de Sánchez, se anuncie al candidato que batallará con Almeida en los próximos comicios municipales.