J.Q.
Eurostat informó esta semana de que la inflación interanual en la eurozona se situó en junio en el 5,5%. Se trata de un descenso de seis décimas respecto al mes anterior. Es el nivel más bajo desde el inicio de la guerra en Ucrania. El conjunto de la UE, por otro lado, se sitúa en el 6,4%, siete décimas por debajo del registro de mayo.
Se trata del octavo mes consecutivo de desaceleración en el continente, tras el máximo alcanzado el pasado mes de octubre, cuando la inflación media en la zona euro alcanzó el 10,6%.
La inflación subyacente (que excluye los alimentos frescos o la energía) sí ha experimentado una subida hasta el 5,5%, dos décimas por encima del mes de mayo. Este podría ser el principal argumento para que el Banco Central Europeo siga con su política de subida de tipos, que ya se encuentran en el 4%.
España, por su parte, registra la segunda tasa de inflación más baja de la UE, situándose en el 1,6%. Sólo Luxemburgo, con un 1%, tiene mejores datos. La inflación en España, de esta forma, se mantiene cuatro veces inferior a la media de los Veintisiete.