J. Q.
Nicolas Sarkozy fue condenado hace unos días en apelación a tres años de cárcel. Es decir, la misma condena que la justicia le interpuso en marzo de 2021 por un delito de corrupción cometido en 2014. Está exento de cumplir dos de esos tres años, mientras que el restante podrá completarlo bajo arresto domiciliario mediante un brazalete electrónico. Los medios franceses apuntan a que el ex jefe del Estado recurrirá la sentencia al Tribunal Supremo, para lo cual tiene de plazo hasta el final de la presente semana.
El ex mandatario fue condenado en marzo de 2021 por, según la sentencia, tratar de obtener beneficios judiciales de un alto magistrado. La Fiscalía solicitó el pasado diciembre una reducción de esa pena de tres años que finalmente no se ha llevado a cabo por la gravedad que el juzgado ha visto en sus acciones. “Se benefició de su estatus de presidente para obtener un beneficio personal (…) Atenta contra la confianza de los ciudadanos”, ha explicado la presidenta del tribunal.
También han sido condenados el abogado de Sarkozy y el magistrado en cuestión. No obstante, ninguno de los dos ingresará tampoco en prisión.
Esta pena de Sarkozy se suma a la que la justicia le interpuso en septiembre de 2021 por financiación irregular de una de sus campañas electorales.
Interesante, gracias.