El precio de la luz ha alcanzado máximos históricos, convirtiéndose en el mayor quebradero de cabeza de un Gobierno que no acierta a desenmarañar una factura que ha encendido los ánimos en los hogares y las empresas españolas. Desde las asociaciones de usuarios denuncian la falta de medidas efectivas, exigen una solución y proponen medidas para atajar un problema con demasiadas derivadas que amenaza con alterar el discurso de la recuperación del Ejecutivo. Desde la OCU piden a la CNMC abrir una investigación sobre el llamativo incremento de los últimos meses y FACUA acusa a la vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica de eludir su responsabilidad. A continuación, reproducimos su análisis de la situación y sus demandas para contener la que es ya una amenaza para las personas vulnerables y para la cuenta de resultados de las pymes.
El mes de agosto dispara el precio de la electricidad a máximos históricos, con un precio medio de casi 106 euros por MWh. La factura de la luz acumulada durante 2021 resulta un 25,1% más cara que la del año 2020 hasta el mes de agosto, según indica OCU. Para esta organización, la rebaja del IVA es insuficiente para paliar el impacto de estos incrementos, por eso insiste en la necesidad de poner freno a esta escalada.
En el mercado mayorista el coste de cada MWh ascendió concretamente a 105, 94, batiendo récords. Este resultado es un 14,6% más elevado que el mes de julio, que tenía hasta ahora el máximo registrado.
La cifra casi triplica el precio que se alcanzó en agosto de 2020 (36,2 euros /MWh) y está también muy por encima del que hasta ahora había sido el mes de agosto más caro, el de 2018, que tuvo un precio de 64,33 euros/MWh.
En agosto, en tres de cada cuatro días se han superado los 100 euros/MWh
En agosto, en tres de cada cuatro días se han superado los 100 euros/MWh. Y la escalada ha culminado el día 30 de agosto con más de 130 euros por MWh.
Además, pese a que en algunos momentos se ha relacionado el alza de los precios con el elevado consumo durante el mes de agosto (ola de calor…), la OCU señala que la realidad es que este agosto de 2021 se ha caracterizado por un consumo eléctrico muy inferior al de años anteriores: un 3,4% menos que el año pasado y hasta un 7,4% menos que el consumo realizado en agosto de 2017. Los descensos en el consumo han sido más elevados en días laborables que en sábados y domingos, por lo que es más atribuible a la actividad industrial que doméstica.
Facturas cada vez más caras
El término de la energía supone aproximadamente un 30% del total de la factura de la luz. El incremento del precio de la energía hace que en agosto el importe de la factura de la luz de un hogar medio (4,6 kW de potencia y 292 kWh de consumo mensual) se dispare hasta los 78 euros, un 38% más de lo que se pagó el año pasado por estas mismas fechas. El incremento respecto al pasado mes es de 5,8 euros, esto es, un 8% más elevada que la factura de julio (72,2 euros), que ostentaba hasta ahora el máximo.
Todo ello, con la rebaja temporal del IVA del 21% al 10%, que se va a producir hasta final de año mientras los precios mayoristas no bajen de 45 €/MWh.
Al tratarse de un bien de primera necesidad, esta rebaja del IVA debería ser permanente, defiende la OCU dentro de su campaña donde exige 10 medidas por unas tarifas eléctricas justas y asequibles entre las que también se encuentran un mayor control para frenar las manipulaciones del mercado, una revisión del sistema de fijación de precios mayorista o un fomento de la competencia empresarial.
Las subidas del precio de la luz afectan directamente a los hogares con la tarifa regulada PVPC, ya que su tarifa está indexado al mercado mayorista. Algunas compañías, precisamente las responsables de fijar esos elevados precios en el mercado mayorista, han propuesto la eliminación de la tarifa PVPC. OCU considera que eliminar la tarifa PVPC, lejos de solucionar el problema, lo agravaría aún más. Son muchas las comercializadoras que pese a la competencia de la tarifa PVPC, están ofreciendo precios fijos, con precios superiores incluso a los precios máximos que la tarifa PVPC está alcanzando en este periodo.
Evolución del precio de la factura de la luz
Las subidas se dejan sentir: los hogares españoles están acumulando durante 2021 (de enero al 30 de agosto) una factura de más de 547,68 euros frente a los escasos 438 euros del mismo periodo del pasado año. Es decir, un incremento de más de 109,8 euros. Hasta el momento los consumidores con PVPC han pagado por la factura de la luz un 25,1% más que en 2020. Esta evolución se traduce en un sobrecoste real de la factura, la más elevada de los últimos años.

Aunque este incremento de factura impacta de forma directa a los hogares que tienen contratada la tarifa regulada PVPC o alguna de las tarifas indexadas al mercado mayorista, OCU advierte de que las tarifas del mercado libre tampoco se libran. Se están registrando aumentos de casi un 30% en el mercado libre, lo que exige extremar la cautela.
Por eso, la asociación recomienda a los usuarios comparar antes de contratar una tarifa nueva –su web dispone de un comparador– y prestar mucha atención a las comunicaciones que haga la compañía eléctrica sobre la revisión de su tarifa: la CNMC ya ha detectado irregularidades en estas actualizaciones.
La nueva tarifa de electricidad estrenada en junio ha creado una incertidumbre adicional y algunos medios le han achacado cierta responsabilidad en la subida de los precios. Los tramos horarios tienen en realidad un efecto casi neutro y los incrementos en la factura de los hogares con PVPC –tarifa de Precio Voluntario al Pequeño Consumidor, también conocida como tarifa de luz por horas– hay que achacarla a la subida del precio de la energía en el mercado mayorista, cuya evolución repercute directamente en esta tarifa y en el resto de tarifas indexadas; tras un año 2020 con precios mayoristas bajos, durante 2021 los precios mayoristas acumulan máximos día a día.
Investigación de la CNMC
La OCU sostiene que no hay una explicación completa y satisfactoria sobre la espectacular e histórica subida del precio de la electricidad. A pesar de que se achaca en exclusiva a la subida del precio del gas natural y el precio de los derechos de emisión de CO2, OCU ha denunciado que es la generación hidráulica la que en la práctica fija el precio durante la mayor parte de las horas del día en el mercado mayorista.
Ante esta situación, desde la organización exigen a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que abra una investigación sobre el escandaloso incremento del precio de la electricidad de los últimos meses, que tiene un fuerte impacto en los hogares más desfavorecidos, y exige al Ministerio de Transición Ecológica que acelere implantación de medidas que pongan freno a este incremento de precios.
Responsabilidades desatendidas
Aunque el incremento impacta en la tarifa regulada o indexada al mercado mayorista, las del mercado libre han registrado aumentos de casi el 30%
Desde FACUA hacen una lectura muy semejante de la situación que se ha generado en los últimos meses y acusan directamente a la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera, de que agosto haya finalizado con la factura de la luz más cara de la historia: 93,10 euros para el usuario medio. Consideran que la ministra y vicepresidenta tercera elude su responsabilidad y sostienen que se desentiende de su capacidad de intervenir tarifas para proteger a los consumidores vulnerables, conforme a la Directiva Europea de 2019.
Con un recibo un 46,0% encima de los 63,77 euros de agosto del año pasado, según el análisis de esta asociación de consumidores, califica de “lamentable” que en su comparecencia en el Congreso de los Diputados de este pasado lunes, Ribera haya “eludido su responsabilidad negándose a acometer reformas de calado en el sector para abaratar el recibo y reducir los desproporcionados beneficios del oligopolio energético”. El secretario general de FACUA, Rubén Sánchez, cree que “el argumento de que Bruselas no permitiría determinadas medidas es un mantra en el PSOE” al que ya recurría la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, cuando se negaba a bajar el IVA de la luz, algo que finalmente ha hecho fruto de la presión de la ciudadanía y el socio de Gobierno.
Sánchez considera “inaceptable que Ribera rechace sacar tanto la generación nuclear como la hidroeléctrica de la subasta diaria y para someterlas a precios fijados por el Ejecutivo”, una medida que reivindican tanto la asociación como Unidas Podemos. “La vicepresidenta argumenta que hacerlo confrontaría con el derecho comunitario, pese a que Francia sacó en 2011 la cuarta parte de su producción nuclear de la subasta y es el Gobierno el que establece periódicamente su precio (el conocido como sistema Arenh)”, señala el secretario general de FACUA.
Asimismo, la asociación exige al PSOE la “empatía social” que pide la ministra de Transición Ecológica a las eléctricas y asegura que “resulta obvio que no va a tener un oligopolio dedicado a la maximización de beneficios inflando las tarifas y cometiendo prácticas fraudulentas con los consumidores”.
“Ribera sólo sabe poner excusas para no actuar, con el falaz argumento de que las medidas que le reclamamos serían ‘frontalmente contrarias al marco comunitario’, mientras parece haberse olvidado de su responsabilidad de proteger a los ‘consumidores vulnerables’ y la capacidad de intervenir las tarifas que le otorga la Directiva Europea del sector eléctrico 2019/944”, ha señalado el secretario general de FACUA.
En su artículo 5, dicha norma establece que “los Estados miembros podrán aplicar intervenciones públicas en la fijación de precios para el suministro de electricidad a los clientes domésticos en situación de pobreza energética o vulnerables”. En este sentido, la Directiva no pone límites a los criterios económicos que pueden utilizar los Estados miembro para considerar a un consumidor como vulnerable.
Más de 29 euros de subida para el usuario medio

Volviendo a los datos sobre la evolución del recibo del usuario medio, FACUA señala que este agosto se encarece 29,33 euros con respecto al de agosto de 2020. La subida frente al mes pasado, cuando se situó en 85,34 euros, representa 7,76 euros (un incremento mensual del 9,1%). Si el Gobierno no hubiera bajado el IVA al 10% para las facturas emitidas desde el 26 junio hasta final de año, la factura de agosto habría alcanzado los 102,41 euros, 9,31 euros por encima del importe final.
Hasta la fecha, los cinco recibos del usuario medio más elevados a nivel histórico han sido los 93,10 euros de este agosto, los 88,66 euros del primer trimestre de 2012 (con el IVA al 18%), los 87,81 euros de enero de 2017, los 85,34 de julio de 2021 y los 83,55 euros de septiembre de 2018 (en los tres casos con el IVA al 21%).
Por otra parte, en lo que va de año el recibo del usuario medio acumula una subida interanual del 29,5%. En los ocho primeros meses de 2021 ha representado una media de 79,61 euros mensuales (siempre con los impuestos incluidos), frente a los 61,46 euros del mismo periodo de 2020. Su importe, mes a mes, ha sido de 80,48 euros en enero (subida interanual del 18,5%), 62,08 euros en febrero (bajada interanual del 3,8%), 70,90 euros en marzo (+18,0%), 81,55 euros en abril (+46,4%), 82,13 euros en mayo (45,4%), 81,27 euros en junio (34,2%), 85,34 euros en julio (36,2%) y 93,10 euros en agosto (46,0%).
FACUA ha planteado un decálogo de reivindicaciones al Gobierno, entre ellas un cambio en las reglas de la subasta del mercado mayorista para que tanto la hidroeléctrica como la nuclear salgan y se sometan a un precio fijo, la creación de una empresa pública que aglutine a las centrales hidráulicas a las que finalicen las concesiones, la bajada del IVA de forma permanente, el control de las ofertas fraudulentas de las eléctricas y la aprobación de un nuevo modelo de bono social que represente al menos un 50% de descuento en la factura y del que se puedan beneficiar las familias que cobren no más de dos salarios mínimos, que aumentarían hasta tres en función del número y características de sus miembros.
El usuario medio
En lo que va de año, el recibo del usuario medio acumula una subida interanual del 29,5%
El usuario medio utilizado por FACUA en sus análisis tiene una potencia contratada de 4,4 kW –la misma en horario punta y valle– y un consumo de 366 kWh mensuales. Es un perfil elaborado tras el análisis de varias decenas de miles de facturas de viviendas habitadas. En cuanto a los porcentajes de consumo en los tres tramos horarios del nuevo sistema de facturación, la asociación ha tomado como referencia el perfil de usuario medio tradicional sin discriminación horaria publicado por la CNMC, que consume el 45% de la electricidad en el horario valle, el 29% en el horario punta y el 26% en el horario llano.
De lunes a viernes, el horario punta –el más caro– se aplica de 10 a 14 horas y de 18 a 22 horas, el llano de 14 a 18 horas y de 22 a 00 horas, y el valle –el menos caro– de 00 a 8 horas. Sábados, domingos y festivos nacionales se aplica las 24 horas el horario valle.
Subida del kilovatio hora
En agosto de 2020, el precio del kWh se situó en una media de 12,18 céntimos. En agosto de este año, el precio medio ha sido de 15,66 céntimos en horario valle, 20,34 céntimos en horario llano y 31,33 céntimos en horario punta. La media aritmética entre los tres tramos ha sido de 22,44 céntimos, un 84,2% más que hace un año. La media ponderada tomando como referencia el consumo del usuario medio en cada tramo ha sido de 21,41 céntimos, un 75,8% más elevada que en agosto de 2020.