La izquierda abertzale sigue haciendo gestos que les quitan los argumentos a los que les acusan de no haber roto con el legado de ETA. Después de que el diputado de EH Bildu Jon Iñarritu se solidarizaba públicamente con el diputado de Vox Antonio Salvá, padre de un guardia civil asesinado por ETA, ha sido el turno de la portavoz del grupo en el Congreso, Mertxe Aizpurua, que se ha sumado al homenaje que la Cámara Baja ha tributado esta semana al exministro socialista Ernest Lluch, al que asesinó ETA hace ahora 20 años.
El homenaje estuvo presidido por la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, y recogió la intervención de varios exministros de Sanidad, el cargo que ocupó Lluch en el primer gabinete de Felipe González. En total, fueron cuatro socialistas (Julián García Valverde, Elena Salgado, Trinidad Jiménez y María Luisa Carcedo) y dos populares (Alfonso Alonso y Ana Pastor)., además del responsable actual de la cartera, Salvador Illa.