El Gobierno ha acordado ya con la Comisión Europea la nueva senda de estabilidad que establece los nuevos objetivos de déficit y de deuda pública para los próximos cuatro años, según fuentes gubernamentales citadas por Europa Press.
El Ejecutivo espera haber podido reducir el déficit del 2,5% del PIB al 2% en 2019 y ha estado conversando con Bruselas en las últimas semanas para poder flexibilizar la senda de déficit con el fin de conseguir un mayor margen fiscal para este año, ya que la meta oficial aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy era del 0,5% del PIB para este año y estabilidad presupuestaria ya en 2021.
Sin embargo, se trata de unas metas prácticamente inalcanzables puesto que, en un contexto de prórroga presupuestaria, el Gobierno de Pedro Sánchez, que no ha podido aprobar aún ninguna senda, comunicó a Bruselas que estimaba un desajuste del 1,1% del PIB este año o el 1,7% a políticas constantes, y auguraba un déficit del 0,4% en 2021, aplazando la estabilidad presupuestaria para el año 2022.