A. M.
Varias Comunidades Autónomas se han vuelto a enfrentar al Ejecutivo por el nuevo criterio establecido para el reparto de los 16.000 millones de euros del Fondo de Reconstrucción que el Estado transferirá en los próximos meses para hacer frente a la pandemia.
El presidente, Pedro Sánchez, comunicó a los responsables regionales la nueva distribución del dinero, que se dividirá en tres bloques. La principal novedad es el nuevo tramo de 2.000 millones destinados a la educación; 9.000 millones estarán destinados al gasto sanitario; y 5.000 millones a compensar la caída de los ingresos fiscales provocada por la reducción de la actividad económica. Se abonarán en cuatro tramos, el primero, de 6.000 millones, para sanidad, se desbloqueará en julio. El segundo, con los 3.000 millones restantes del gasto sanitario, en noviembre. El tercero será el de los 2.000 millones para el gasto educativo, en septiembre. Y el último, los 5.000 millones para reparar la bajada de ingresos, llegará en diciembre. Las autonomías no tendrán que devolverlo al Estado.
Los presidentes de las zonas más afectadas por el Covid-19, como Cataluña, Galicia, las dos Castillas y Cantabria creen que el cambio les perjudica porque el factor poblacional gana peso. Con la nueva distribución, de los primeros 6.000 millones, la población protegida equivalente pasará de pesar un 20% a un 35%; en los siguientes 3.000 millones, pasará del 40% al 45%. Respecto a los 2.000 millones de educación, el 80% se repartirá según la población de 0-16 años y el 20%, de 16 a 24 años. «Es injusto y deja en la estacada a las comunidades que más hemos sufrido la pandemia», se ha quejado el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, que añade que «el cambio de criterio en el reparto del fondo no paga la factura del Covid, los sobrecostes reales de la pandemia en sanidad y servicios sociales».