
Mar de Fondo / Raimundo Castro
Pedro Sánchez tiene claro que marzo es el mes ideal para tranquilizar las aguas del rio revuelto. Para ello, el presidente cuenta especialmente con la moción de censura presentada por Vox, que se va a tomar muy seriamente y en la que intervendrá personalmente, pero para darle patadas en el culo al PP al tiempo que defiende su modelo, que define como “el de la gente”.

Un 28-M municipal y autonómico preocupa al líder del PSOE porque considera que su partido va a ganar en muchos sitios, pero si Podemos y Sumar siguen a la greña, puede encontrarse con que, aunque triunfe, no podrá gobernar sin el apoyo de la izquierda a su izquierda
En marzo, además, cambiará el Gobierno lo justo para dejar claro que piensa agotar la legislatura manteniendo el Gobierno con Podemos. En contra de algunos rumores interesados de la derecha e incluso opiniones de miembros de la Ejecutiva del PSOE que se han pronunciado internamente en favor de aprovechar los cambios para enviarle un serio aviso a Podemos cambiando alguna de sus ministras, piensa dejar las cosas como están. Aunque, eso también, ha dado un puñetazo sobre la mesa para arreglar algunas cosas como, por ejemplo, la reforma de la ley del ‘sólo sí es sí’, cuyo proyecto de corrección de penas a la alta, presentará en el Congreso, significativamente, el 7 de marzo, en vísperas del 8-M, le guste o no a un Podemos cerril, dividido internamente en el asunto, pero cuya remodelación reclaman tres cuartas partes de la sociedad, según sus encuestas.
De modo que en breve saldrán del Consejo de Ministros las ministras Reyes Maroto y Carolina Darias para ser candidatas en Madrid y Las Palmas y seguirán dentro Yolanda Díaz, Ione Belarra e Irene Montero, que son las que mandan en su partido y en el Grupo Parlamentario. Y aquí paz y después gloria hasta diciembre sin que la sangre llegue al río en ningún momento. La fecha de los cambios dependerá de la moción de censura porque Sánchez quiere que la modificación del Gabinete sea un auténtico disparo de salida de la carrera hasta el 28 de mayo.
Un 28-M municipal y autonómico que preocupa al líder del PSOE porque considera que su partido va a ganar en muchos sitios, pero si Podemos y Sumar siguen a la greña, puede encontrarse con que, aunque triunfe, no podrá gobernar sin el apoyo de la izquierda a su izquierda. Por eso, sabedor de que la pelea es sobre todo por los cargos, desea que Díaz y Montero acuerden las listas cuanto antes para que, cuando menos, los que sepan que van en puestos de salida se tranquilicen y le ayuden a lograr su objetivo de que se tranquilicen las aguas cuanto antes.
Sobre todo en el Congreso, donde piensa que en proyectos como el de la Vivienda o la ‘Ley Mordaza’ se puede llegar a acuerdos ya mismo y que no se hace por el pulso electoral. Porque todos los socios, incluido el PNV, pese a la buena relación de socialistas y Bildu, están por la labor de aguantar hasta diciembre como sea. Además, sabe que el PNV no está para diálogos con el PP como hacía antes. Y es precisamente porque Feijóo va con Vox, algo que en Euskadi es una auténtica línea roja.
Después de todo, él sabe que para gobernar municipios y autonomías, pero sobre todo para las generales, necesita al menos un 13 por ciento de la izquierda a su izquierda, de ese voto que no volverá al PSOE salvo, en muy pequeña parte, en las zonas donde el voto a Sumar o Podemos no valdrá de nada (pequeñas provincias en las que el voto útil puede dirigirse directamente a Sánchez, sobre todo si la derecha sigue los pasos de Donald Trump como hasta ahora).
De ahí que el presidente quiera aprovechar la moción de censura de Vox para dar patadas en el culo al PP. Y de hecho ya ha empezado recordando que Pablo Casado votó en contra de la anterior y Alberto Núñez Feijóo, en cambio, se ha inclinado por la abstención. Sánchez dejará claro que Feijóo está atado de pies y manos porque necesitará a la ultraderecha para gobernar tras las generales y para hacerlo en grandes ayuntamientos y alguna autonomía, como la castellano-leonesa. Si es que finalmente puede hacerlo. Que a saber.
Periodista y escritor