Beatriz Núñez.
Los grupos automovilísticos PSA y Fiat Chrysler han firmado esta semana un acuerdo que posibilita su fusión al 50% y que responde a la necesidad de adaptarse a un entorno tecnológico cambiante.
La unión, que ha dado lugar al cuarto grupo automovilístico mundial, no se completará hasta pasados 12 o 15 meses, pero Carlos Tavares, presidente de PSA, y Michel Manley, consejero delegado de Fiat Chrysler, ya han firmado este miércoles un «acuerdo de acercamiento vinculante».
Sobre la fusión, Tavares ha concluido que tiene como propósito «la transición a un mundo de movilidad limpia, segura y sostenible». Ambos grupos se han conformado en una única empresa valorada ahora en 45.000 millones de euros que agrupara marcas como Peugeot, Opel, Citroën, Jeep y Fiat. Además, este nuevo conglomerado elevará los resultados de explotación hasta los 11 millones.
«En la vida de cada gran empresa y de su gente algunos acontecimientos son inmediatamente reconocibles como hitos destinados a entrar en la historia», concluía el presidente de Fiat y futuro presidente del nuevo grupo PSA-FCA, John Elkann, sobre su acuerdo.
