El Partido Socialdemócrata (SPD) recuperó el liderazgo en Alemania a través de Olaf Scholz, el nuevo canciller federal al frente de una coalición inédita con verdes y liberales, que cierra el periodo de 16 años en el poder de la conservadora Angela Merkel. Scholz, de 63 años, vicecanciller y titular de Finanzas en la última gran coalición, fue investido por el Parlamento federal, dos meses y medio después de las elecciones generales y tras un exitoso proceso negociador en busca de socios de gobierno.
El SPD y Los Verdes gobernaron juntos durante las dos legislaturas de Gerhard Schröder como canciller, entre 1998 y 2005. Habrá que ver cómo encajan en esa alianza los liberales, tradicionales aliados de los democristianos.
Scholz anunció que viajará a París y luego a Bruselas, como es tradición, en los días siguientes a su investidura, y seguirá así la tradición de sus antecesores en cuanto a prioridades en política exterior. Con el viaje a París se quiere remarcar la “vitalidad de la relación” con el país vecino, mientras que Bruselas representa no solo “nuestra alianza preferente a escala europea, sino también el eje transatlántico”, indicó Scholz, en relación a la Unión Europea y la OTAN.