A.A.
Se cumple un mes desde que Rusia atacó a Ucrania. Los ataques continúan sucediéndose con dureza en las principales ciudades del país y las negociaciones siguen estancadas. El asedio está siendo especialmente duro en la ciudad de Mariúpol, donde autoridades ucranianas denuncian que más de 100.000 civiles siguen atrapados. A pesar de la ofensiva rusa estas resisten. De momento, las tropas no han conquistado enclaves como Mariúpol o Járkov y tampoco han conseguido tomar la capital, Kiev. Según Naciones Unidas ya son más de 10 millones los desplazados por el conflicto y más de 1.000 los civiles fallecidos, aunque la ONU advierte que probablemente el número sea mayor.
La OTAN y el Consejo Europeo se han reunido este jueves en Bruselas para tomar nuevas medidas ante Rusia. En la cita, además de los dirigentes europeos, estarán presentes el presidente estadounidense, Joe Biden y, aunque sea de forma telemática, el Presidente Ucraniano, Volodymyr Zelenski. Estos encuentros tienen dos principales objetivos. Hacer frente a la crisis energética y económica derivada del conflicto y pactar medidas en materia de seguridad y defensa europeas. Por el momento, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ya anunció que la Alianza desplegará cuatro nuevos batallones para defender su flanco oriental.
Por su parte, Rusia ha respondido a las sanciones a occidente con su propio paquete de medidas. Putin ha anunciado que a partir de ahora el pago del gas y petróleo ruso deberá hacerse en rublos. Con esta maniobra se busca mitigar el impacto de las sanciones impuestas y aumentar la entrada de divisas.