Confidencial TV / Jorge Vegas
Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, considera una «falta de respeto al pueblo andaluz y sus tradiciones» la ‘broma’ de ‘Esta pàssant’ (TV3) magacín satírico donde apareció una actriz con un cartón frontal que imitaba a la Virgen del Rocío en una parodia chusca que derivó en una conversación sobre «el barroquismo de las vírgenes en Andalucía, frente al ‘minimalismo’ de la Moreneta». Todo en un tono bufo y superficial. La aparición en el estudio carecía de gracia y abundaba en vulgaridad (la alusión al ‘polvo’).
Sin embargo, frente al tono encendido y exaltado de algunos medios y entidades, sorprende el medido de Moreno en su queja, donde se limita a pedir que «ofrezcan disculpas» por este ‘sketch’ carente de gracia alguna. Mientras, el PP dice que llevará el tema al Consejo de Medios Audivisuales Catalanes y al Parlament.
En tanto, Toni Soler, artífice del espacio, dice que «no se va a disculpar»; algo impropio de un comunicador que debe estar abierto a toda clase de opiniones incluso las contrarias, aunque no esté de acuerdo con ellas.
Lo ridículo en este caso es llevar el rechazo a la parodia al terreno de la ofensa antiandaluza, antirreligiosa o burdamente catalanista. La crítica hay que hacerla al espacio (y a TV3) porque no se ve ni rastro de talento o ingenio, sino una idiotez de origen. Lo ridículo no es la parodia, sino la falta de gracia que transmite y lo manido del tópico que propone.
Sara Montiel: despedida casi clandestina
Diversos medios han recordado estos días el 50º aniversario de la muerte de Picasso, en TVE con materiales y piezas informativas, y el 10º de la desaparición de Sara Montiel, a la que ‘Cine de barrio’ homenajeó con ‘El último cuplé», y un documental en La 2. Lo que ahora sería oportuno (¿o mejor inoportuno?) recordar es la fría despedida oficial a la máxima estrella del cine español durante una época en los mercados internacionales. Aunque su féretro se paseó por el centro de la capital, no hubo presencia de ningún destacado representante del gobierno de Rajoy. Ni siquiera del entonces ministro de Cultura, José Ignacio Wert, en una de las más frías despedidas que se recuerdan a un personaje popular en este país.
Sara Montiel se hubiera merecido que Wert, o el propio Rajoy, se hicieran presentes aunque sólo fuera por unos minutos en la capilla ardiente. Claro está, Wert fue el ministro que mantuvo una de las mayores distancias con el mundo de la cultura, posición que debió ser enmendada por el más comunicativo, comprensivo y dialogante Méndez de Vigo. Con el gobierno de Aznar y nada más ser nombrada Pilar del Castillo ministra de Educación, Cultura y Deporte, su primera presencia pública fue acudir a la capilla ardiente de Buero Vallejo, a las pocas horas de su fallecimiento.
La fría despedida a Sara Montiel por parte de Wert (y Rajoy) se recuerda diez años después, como un ejemplo de lo que no debe hacerse.
Jorge Javier, en la picota
El conductor de Telecinco vuelve a ser el objeto de las críticas de los medios de la derecha radical, en este caso del digital de Eduardo Inda, colaborador en varias tertulias televisivas, que llama ‘chaquetero’ a JJV por hacerse presente y fotografiarse junto a Yolanda Díaz, a quien apoya públicamente, tras haberlo hecho en otras elecciones por Gabilondo o Pedro Sánchez, y al que el comunicador responde irónicamente.
JJV no se aparta del tema Ana Obregón y en ‘De Luxe’ afirma tras escuchar este comentario en ‘Hola’ de la madre-abuela: «Aquí (por Estados Unidos) está la gente abierta, pero en España estamos en el siglo pasado». Vázquez responde: «Ella es muy patriota, pero cuando se va de España, ¡cómo pone a la gente que vivimos en este país!».
…Y más Obregón
Las circunstancias en torno a la ‘maternidad’ de la famosa siguen llenando los magacines de las televisiones habida cuenta de que potencian la audiencia a medida que cada semana se añaden nuevos contenidos al culebrón. Con temas como lo que presuntamente puede estar cobrando con las exclusivas, en un amplio margen de cifras que va de los 500.000 al millón en total. Frente a las críticas cada vez más sonoras de expertos en Derecho Civil y aquellos que se ocupan de la protección de los menores.
El remate llegará en los próximos días con la vuelta a España de Obregón y la negociación para su primera exclusiva en un estudio de televisión, que podría alcanzar una cifra millonaria.
Pero la ‘bomba’ puede ser una docuserie sobre la estrella, a explotar primero en una plataforma y luego en abierto, en la que Obregón contaría su vida.
Bajo consumo de televisión
Si marzo registró el más bajo consumo histórico de televisión, abril no parece irle a la zaga, especialmente en los días de Semana Santa donde la fragmentación de las audiencias ha hecho que pocos contenidos superen el millón de espectadores. Por contra, y a pesar de los pesares, los cines españoles han tenido la mejor semana en lo que va de 2023 con casi 2.000.000 de entradas vendidas en estas jornadas, pese al buen tiempo y las salidas al exterior.
El negocio de Bárbara Rey
Aunque esté vetada en Telecinco, Bárbara Rey tiene una ventana abierta en Antena 3 donde se acaba de estrenar en su plataforma A3 Premium y en abierto en la cadena la docuserie ‘Una vida Bárbara’, en la que aparecen personajes que han estado en su vida como Chelo García Cortés (tema que no podrá ser comentado en ‘Sálvame’ ni en ningún espacio de Mediaset). Pendiente del futuro estreno en abierto en Antena 3 de la serie de ficción ‘Cristo y Rey’, bajo el hilo temático de los ‘biopic’ de esta empresa, como ‘Nacho’ (Vidal) que también acabará por pasar a la programación en abierto. Semanas atrás, Esperanza Aguirre se mostró muy crítica contra Bárbara Rey por airear su relación con Juan Carlos I en aspectos que según la expresidenta de la Comunidad de Madrid «pertenecen a su esfera privada».
‘Masterchef’ no suma
La duplicación de ediciones del espacio-‘show’ sobre cocina en La 1 no supone una mejora de la audiencia, sino todo lo contrario. Pasar excepcionalmente al domingo esta edición no ha repercutido en una mejora. Por el contrario, su 9,7% está por debajo del doble dígito y tiene menos espectadores que la media del último mes de ‘La película de la semana’. Mientras, la edición del lunes marcó 11,5% pero sin liderar como era habitual en otras temporadas. Replicar contenidos a lo largo de la programación o buscar el gancho de la programación estelar para nuevas series no siempre funciona. Ahora la ‘prueba del algodón’ será ‘Cuatro estrellas’ a lo largo de días laborables en La 1 y a modo de ‘tira de ficción’, porque en torno a su resultado gravitará la programación del resto del ‘prime time’.
En las últimas semanas, los vaivenes de la programación se suceden en La 1 con constantes variaciones de espacios para evitar competir con valores seguros. El ejemplo más evidente, ‘Cover Night’, un formato que pretendía ser estelar, estrenado en jueves con un 11,9% y que tras su desplazamiento al sábado ha confirmado su declive hasta el 6% y que vuelve a su emplazamiento original para resolver la papeleta de sus últimos contenidos ya grabados en un programa a amortizar porque cada edición le cuesta cerca de los 700.000 euros.
Dragó y su lanzamiento televisivo
La desaparición de Sánchez Dragó nos priva de uno de los comunicadores más sueltos en la controversia, y que hizo de la provocación una seña de identidad y uno de los secretos de su impacto público, dentro y fuera de la pequeña pantalla o del mundo de los libros. Dragó quiso ser cineasta y no pudo, fue comunista y estuvo brevemente en la cárcel en 1956 por antifranquista y en su última época se presentó como joseantoniano y adlátere de Vox. Su lanzamiento mediático tuvo lugar con ‘Encuentros con las letras’ (antes titulado ‘Con las artes y las letras’) en TVE entre 1976 y 1981, donde presentaba con Elena Escobar y Roberto Llamas, y en la que había una amplia nómina de periodistas y autores conocidos (Daniel Sueiro, Miguel Bilbatúa, Antonio Castro, Trapiello, Jesús Torbado, César Gil, J. L. Jover…). Era un Dragó previo a los giros provocadores que le hicieron pisar toda clase de charcos de su etapa posterior en TVE, Canal 9 y Telemadrid, favorecido por su cercanía a personas del PP; sin negarle su capacidad de síntesis cultural y facilidad de expresión.