¡Vaya gente! / Mara del Prado
Se ha casado Paris Hilton. Con su fiesta de tres días se da por concluida la contrareloj nupcial de 2021, que arrancaba el otoño con los enlaces pospuestos por la pandemia por las parejas más impacientes a la espera de una segunda oleada en primavera de las más precavidas; Chenoa se casará en junio de 2022 con ‘su’ médico, Miguel Sánchez.
Más parejas. Charlene ha salido de Sudáfrica, pero sigue sin entrar en Palacio. A pesar del posado de la princesa de Mónaco con su marido Alberto y sus hijos, Jacques y Gabriella, la exnadadora no está en condiciones de atender la agenda oficial de consorte. Según declaraciones de su marido en la revista People, sigue retirada de la vida pública por “agotamiento, tanto emocional como físico”. El asunto está tomando un cariz más que rocambolesco, siniestro. ¿Qué le pasa a la exolímpica? ¿Por qué no puede recuperarse en su residencia si el soberano niega una crisis matrimonial? Carolina y Estefanía de Mónaco disimulan la preocupación por la salud de su cuñada porque, sin relajar la sonrisa, han asumido sus funciones en la reciente celebración del Día Nacional o en un reciente viaje a la Exposición Universal celebrada en Dubái.
Rumores de reconciliación entre Felipe (Froilán) de Marichalar y Mar Torres y primeras imágenes de Pablo Urdangarin y su compañera Juliana. Hola publica unas fotografías del mayor de los nietos de Juan Carlos I y la reina Sofía con su ex, a la que abraza en actitud cariñosa pasado ya el tsunami en que se vio envuelta la joven nieta del fundador de embutidos El Pozo en Instagram, cuyos posados la acarrearon problemas familiares que ella misma aireó en las páginas de la revista.
Abrazos, miradas y risas nerviosas, de esas que provocan las mariposas cuando revolotean en el estómago, protagonizan el segundo de los cuatro hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin y su amiga, estudiante como él del EU Business School de Barcelona. Allí se ven entre clase y clase aprovechando el poco tiempo libre que deja La Masía a su joven jugador de Balonmano, que el pasado octubre se estrenaba con el primer equipo del Barça con el número 77 a la espalda –su padre llevaba el 7–.
Qué decir de la pareja formada por Harry y Meghan. Los duques de Sussex no han despertado aún de su sueño americano. Como dice Hola con cierto tono de reproche, sin renunciar a los símbolos reales: la amapola, que el 11 de noviembre representa el Día del Recuerdo a los combatientes que perdieron la vida desde la Primera Guerra Mundial, las insignias militares, que el príncipe lució sobre su esmoquin de Giorgio Armani para entregar la medalla al valor de cinco veteranos, y la pulsera de Diana de Gales, que la exactriz usó de complemento a un espectacular vestido rojo de Carolina Herrera con amplio escote y gran abertura central en un acto protagonizado por los que llaman ‘príncipes de Hollywood’. Pero, ¿qué quieren? A Estados Unidos le faltaba una Familia Real y ellos han sabido dársela.
