D.G.
La reforma impulsada por PSOE y Unidas Podemos para limitar las competencias del Consejo General del Poder Judicial cuando haya caducado su mandato ha dado su primer paso en el Congreso. La tramitación continuará su andadura parlamentaria pasando por el Senado y podría entrar en vigor en febrero, mes en el que se celebran las elecciones autonómicas catalanas, importantes porque el tema de los indultos a los presos del procés está sobre la mesa.
Tanto PP como Vox y Ciudadanos se han opuesto a esta reforma pero no han podido frenarla, ya que la proposición de ley ha conseguido los 188 votos a favor. El debate se ha desarrollado entre acusaciones de golpismo por parte de los diversos grupos políticos. De un lado y de otro pero por diferentes motivos.
La reforma propuesta llega tras dos años de interinidad del actual CGPJ y la imposibilidad de acuerdo entre PSOE y PP. El partido liderado por Pablo Casado ha puesto entre sus condiciones que Unidas Podemos no esté incluido en las negociaciones de renovación del Consejo y la retirada de la reforma impulsada por los partidos del Gobierno que pretende rebajar la mayoría necesaria para renovar el CGPJ.