¡Vaya gente! / Mara del Prado
Ha llovido tanto desde entonces -corría el año 1995 cuando la conocimos- y han pasado tantas cosas -de las que se ha librado- que queda poco más que decir sobre Gigi Howard.
Pero por osadía, por ignorancia o por ambas cosas, ha decidido convencernos de las bondades de su negocio de belleza rememorando aquellos años en que los paparazzi españoles la perseguían por la calle para descubrir a la misteriosa joven norteamericana que ayudó al entonces príncipe Felipe a olvidar a Isabel Sartorius.
Ni una reina de corazones como Isabel Preysler logró hacer carrera con su marca de potingues. Pero a los americanos les sobra autoestima y la otrora estudiante y modelo -sí, también, como Eva Sannum– quiere desembarcar en nuestro país con su empresa SiO Beauty y su línea contra el envejecimiento, que incluye un enorme parche de silicona con la promesa de suavizar durante la noche las arrugas de rostro, cuello y escote sin tener que recurrir a las inyecciones.
Para contar todo esto se ha ido a Hola que, como contrapartida al marketing, le ha deslizado un par de preguntas a propósito de las consecuencias de haber mantenido un romance con el hoy rey de España. “Yo era muy joven y constantemente sentía que la prensa estaba esperando mi caída. Muchas veces, me abrumaba. Fue intrusivo y aterrador”, lamenta amargamente para la revista que publicó su foto en portada. Pero ya se ha hablado demasiado de las contradicciones y la hipocresía de los personajes con el cuché como para seguir dándole vueltas al asunto.
Quien podría haber sido su sobrina parece querer seguir sus pasos. Pero no como maniquí, Juan Carlos I aún no ha dinamitado la Corona como para que la familia ya permita “modelos de ropa interior”, el despectivo modo en que los monárquicos se referían a la novia noruega del que fuera heredero.
Victoria de Marichalar quiere ser influencer, mucho más acorde con la vida hedonista de los cachorros de las grandes fortunas y/o aristocracia. Ha abierto su perfil de Instagram a todos los públicos como hacen las influencers, dejándose ver cariñosa en la hípica con su novio Jorge Bárcenas, dj y sobrino de “esa persona de la que usted me habla”. Se relaciona con influencers, como la pareja formada por María García de Jaime y Tomás Páramo con la que acudió a la entrega de los premios de Elle en Sevilla. Y se comporta con una influencer, posando en el photocall de la revista con pendientes art decó, zapatos joya y vestido confeccionado en terciopelo azul por Lorenzo Caprile, que dejaba al aire su espalda con un pronunciado escote trasero y su pierna izquierda con una larga abertura lateral.
Lo dicho; mucho ha llovido desde Howard y Sannum.