L.M.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski ha viajado esta semana a Estados Unidos, en su primer viaje fuera del país desde que éste fuera atacado por Rusia, para reunirse con el dirigente norteamericano y para pronunciar un discurso en el pleno del Congreso estadounidense.
Este ha sido su primer viaje fuera de Ucrania desde que comenzara la guerra el pasado 24 de febrero, hace algo más de 300 días. Aunque la visita al país ha durado “unas pocas horas” ambos mandatarios han mantenido una reunión tras la cual la Casa Blanca anunciaba un nuevo paquete de ayudas, valorado en 2.000 millones de dólares, y el envío de misiles Patriot al país europeo.
Zelenski ha asegurado que esta batería de misiles “fortalecerán de forma significativa” el espacio aéreo ucraniano. Igualmente, ha afirmado que “la paz no implica comprometer la soberanía, la libertad ni la integridad territorial de Ucrania” y que la paz con Rusia debe conseguirse a través de “pasos concretos”.
El presidente norteamericano, por su parte, ha advertido que Putin no tiene “ninguna intención de detener esta cruel guerra” y que, ante esto, Estados Unidos ayudará a Ucrania “todo el tiempo que haga falta” y que los ucranianos “nunca estarán solos”.
